Departamento 813 [Rin x Len] [Miku x IA]

Uno: Oportunidad

Al día siguiente Miku llego nuevamente con una carta y el siguiente a ese también. Así se mantuvo por a menos una semana.

- ¡Vamos acéptalo!¡Tienes un admirador!

Hola vecina! ¿Como esta? Hoy se ve excepcionalmente radiante.

Atte Dpto 813

  

Rin achino los ojos como símbolo de advertencia, no quería hablar más del tema.

Mientras su hermana se dedicaba a fastidiarla con el tema de las cartitas Rin se enfundaba un par de guantes y un gorro.

- Miku, basta.- Le pidió.- Tengo una migraña terrible y no tengo tiempo para niñerías,  Debes reaccionar.- Estaba molesta y eso Miku pudo verlo.- Me están haciendo una broma, no tengo ningún admirador secreto y si lo tuviera simplemente no tengo tiempo para él.

Miku bufo, la amargada de su hermana era una aguafiestas.

- Me detendría si mi instinto me digiera lo contrario a lo que me dice.

- ¿Y que es lo que te dice según tu?

- Que ese chico de verdad esta interesado en ti.- Ambas se cruzaron de brazos con expresión desafiante.- Dale una oportunidad, no creo que te estén tomando el pelo.

Rin se lo planteo, en serio, pero sabia que no debía "darle una oportunidad" quizás aquel chico era alguien realmente ficticio y aun que se la diera ellos no se conocían. No tenia idea de quien era, seria como darle una oportunidad al vacío o quizás a algo peor como un acosador.

- No, olvídalo. 

- Puede ser tu oportunidad de vivir una verdadera historia de amor.

- Las historias de amor no existen Miku.- sonrió con tristeza mientras abría la puerta para salir.- Son solo inventos de personas solitarias que nunca han experimentado lo que es el verdadero amor.

Y se fue.

Miku miro la puerta con tristeza.

- Son reales Rin.- susurro como si ella pudiera oírla.- Solo que tu no quieres verlas.

De repente a Miku se le prendió el foco. Tomo su chaqueta, una bufanda y se enfundo un par de botas, luego salio a toda prisa del apartamento y subió a los pisos superiores. Si no había leído mal aquel chico firmaba con "Departamento 813" así que el debería de estar allí.

- 800...801...802...

Continuo subiendo, sus piernas ya no daban más llevaba por lo menos 5 pisos corriendo.

- 809...810...811...812...

Miku se detuvo en seco, no habían más escaleras solo una enorme pared y con ella no quedaban más apartamentos.

El departamento 813 no existía.

- Esto si es una broma de mal gusto.- susurro. Su hermana tenia razón.

Cuando estaba por irse se fijo en algo que no calzaba, un pedazo muy fino de la pared sobre salia y tras tocarlo un poco se dio cuenta que era un papel pintado del mismo color que la muralla.