Locura de amor [Slaxl]

Sesión 5

                           "Sesión 5"

Habían pasado unas cuantas horas desde que llevaron a Rose a la unidad de seguridad, donde se vivían escuchando gritos y llantos. Enfermeros sólo iban a inyectar a los pacientes, algunos a traer las comidas del día, otros venían a sacar a los internados para ir a bañarlos; aprovechaban los conserjes de que las seldas quedaban vacías para limpiarlas, y así monótamente.

Hace poco rato habían ido a darle de comer a Axl, igual le inyectaron tranquilizantes, también le dieron sus pastillas de dormir, porque se acercaba ya la noche y a los encargados no les gustaba que los pacientes queden despiertos por las noches. Axl después de que se fue el paramédico, se 'relajó', pensando vagamente en lo que sucedió en horas atrás, regañándose a si mismo, ¿cómo pudo haber intimidado a un doctor? Quiere disculparse, sabe que él no fue quien quiso gritar y llorar, sino otra persona dentro de él.

- ¿Y tienes familia?

El pelirrojo levantó la vista con rapidez, buscando con la mirada al emisor de esa voz. Luego de segundos captó que era con quien se había reído hace un rato; Manson.

- ¿Te importa? - Respondió con algo de amargura, no le gustaba que le preguntaran ese tipo de cosas, especialmente personales.

- Sí, sí me importa, así que dilo o voy a salir de esta jaula para cortar cada pedazo de tu cuerpo.

Rose sonrió, negando.

- No, no tengo familia, pero una vez estuve casado, ¿eso cuenta?

- ¿Y no tuviste hijos?

A Axl se le anudó un poco la garganta, por lo que no respondió. Reinó el silencio en el pasillo, especialmente entre las dos seldas.

- Yo tenía hijos, pero... Hice algo malo.

El pelirrojo lo observó con atención desde lejos, ¿qué habrá hecho de malo para ya no tenerlos?

...¿Será lo que imagina?

• Slash POV •

Los del turno nocturno estaban llegando, por lo que los que habían estado entre la mañana y la noche se estaban arreglando para irse, pero Saul aún estaba en la oficina leyendo el último contrato que le quedaba por firmar.

El telón negro de la noche ya había caído, el reloj marcaba las 09:00 p.m, por lo que aún se escuchaban carros pasando por la autopista; típico de California. Hudson estaba por firmar el contrato luego de analizarlo por dos horas, pero en eso entró McKagan, quien ya traía abrigo puesto, pero no tan grueso, con suerte estaban en medio del otoño.

- ¿Y tú por qué sigues con delantal? - Preguntó Duff trayendo su maletín en mano. Fue a sentarse a una de las sillas que estaban frente el escritorio del morocho, quien no le había dirigido la mirada en ningún momento. - ¿Slash?

Hudson seguía sin hablar. Tomó su bolígrafo mirando el contrato una y otra vez, sentía que algo sospechoso tenía, así que no firmó, dejando el bolígrafo en su lugar para luego mirar al rubio.

- Me había concentrado en este contrato, pero no lo firmé al final, no me gustó. Y sigo con delantal porque estaba ocupado, no como tú.

- Wow wow wow wow, ¿qué te pasa negro? ¿Por qué tan amargado? ¿No has tenido sexo hace cuánto? - El rubio se rió de si mismo por lo que había dicho, a lo que Saul lo miró mal.

- No sé, y no me importa, sólo quiero llegar a mi casa y colocarme a investigar. - Dijo el morocho colocándose de pie, comenzando a quitarse el delantal y los lentes que traía puestos para leer