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Luces...
- ¡Axl!
Voces.
- ¡Axl no te duermas!
Gritos.
Quizás, la vida no es para todos.
La vida no es para cobardes.
No naciste en una cuna de oro, los vicios te llevaron al hoyo. El amor fue el enemigo que te persiguió.
Cariño, esto ya está jodido.
Esto duele.
Todo estaba pasando lento como la vez anterior, sólo que ahora, una camilla recorría los pasillos de un hospital aliado al psiquiátrico. Las luces golpeaban sin tacto a Rose, quien no podía mantener los ojos abiertos a menos que el reciente doctor que estaba atento a su situación, Duff, le gritara que permaneciera despierto.
Que no durmiera.
- Axl, por favor, no cierres los ojos. - Rogó un Duff McKagan al borde del colapso mental por ver la situación que estaba pasando su paciente. La culpabilidad que sentía por ver a alguien inocente sufrir. McKagan iba sujetando la camilla que iba desplazándose por los que ahora eran eternos pasillos, mientras que distintos enfermeros y un doctor iban en la misma dirección. - ¡Maldita sea Axl no duermas!
Ahora lo que menos había era tranquilidad, ya por las peticiones de los enfermeros en hacer callar a aquel médico psiquiatra sumido en el miedo y desesperación.
Pero lamentablemente, los segundos se acabaron, los días hundidos en blanco de una habitación también.
Olor a medicamentos.
Hedor de transpiración al tener miedo.
Ya no más.
El mundo pareció detenerse ante los ojos de quien había sido testigo del infierno de Rose.
El mundo definitivamente paró.
No respiración.
Adiós latidos.
Un cadáver.
- ¡AXL! ¡AXL! ¡NO, NO, POR FAVOR NO!
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Las paredes aunque no tuvieran vida, podían presenciar una vez más el dolor, y también el olor a muerto que había en el lugar. Llanto reprimido, ardor en el pecho, personas desplomarse en el suelo por el dolor de perder o escuchar su fin. Pero ahora eran testigos de ver otra vez a alguien inocente fallecer.
Descansa en la tierra.
Pero te comerán los gusanos.
- ¿Se encuentra mejor? – Preguntó una enfermera al doctor que, lamentablemente, había llorado por primera vez ante una situación de tal magnitud, tanto emocionalmente como física; Duff no podía creerlo.
- ¿Cómo se encuentra él? – Decidió preguntar el rubio, apenado, pero lamentablemente la enfermera no le ayudó mucho, ya que le sonrió de lado con lástima, dándole leves golpes en el hombro en señal de entrar en confianza y darle apoyo.
- Se mejorará, ya verá. Fue milagro que haya vivido, aunque su corazón se hubiera detenido por segundos; lo trajeron justo a tiempo.
° Flashback °
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Locura de amor [Slaxl]
RomanceSaul Hudson es un médico psiquiatra que tiene una vida un tanto aburrida, a lo que a veces se divierte al momento de interrogar a pacientes, pero no con todos, hay uno que le hace ir todos los días a interrogatorio para pasar el rato; Axl Rose. Axl...