Capítulo extra 2: Narra Annabeth

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Segunda parte del narra Annabeth. Capítulo especial para celebrar mi cumpleaños, lo prometí en mi otra historia, publicaría aquí también.

Seguimos para que entiendan un poco mejor a Annabeth.

Hoy es mi primer día en mi nueva escuela, sólo espero que nadie sepa lo que hice. No aparecí en las noticias, así que no debe ser muy difícil.

Luego de ir a la oficina del director, fui a mi primera clase, tenía historia. Me costó trabajo, pero logré llegar al salón con el tiempo suficiente para sentarme en un lugar vacío al lado de la ventana, no fui la última en llegar, pero si la que atrajo más miradas, siempre ha sido así, desde que comencé a entrenar con Luke, a los 12 años, el mismo año que soñé con él... ¡Basta Annabeth! ¡Te prometiste olvidarlo, fue un sueño, del cual no recuerdas nada! ¡Además, amas a Luke! ¡Él, sea quien sea, no puede cambiar eso!

Decidí olvidarme por un momento de mis pensamientos, justo a tiempo de que el profesor comenzara a hablar.

-Buenos días a todos ustedes, espero que hayan tenido un espléndido verano y que estén listos para trabajar.- Miró un papel sobre su escritorio. -Creo que tenemos dos alumnos nuevos, ¿quienes son?... Nuevas, perdón. Por favor, preséntense.- Dijo el profesor señalando su lado, apuesto a que debo ir allá.

Una chica de cabello grasiento y castaño con un pañuelo en la cabeza.

"Parece ruda." Pensé. "Pero no tanto como yo." Sonreí por el pensamiento, pero pasó al ver la pulsera en mi mano. Aún no logro quitarla, simplemente, no hay forma. Pero fue suficiente para borrar mi sonrisa, recordando la nueva forma de estar encerrado que crearon.

No escuché que fue lo que dijo la chica, pero en cuanto se sentó, supe que era mi turno.

El profesor me pidió que me presentara, me tomé mi tiempo.

-Mi nombre es Annabeth Chase, vengo de San Francisco. – El profesor me miró con cara de "¿eso es todo?" Me encogí de hombros y volví a mi lugar.

El resto de la clase, el profesor habló sobre las guerras, yo traté de prestar la mayor cantidad de atención posible, pero me sentía rara, desde que me presenté a los demás.

Sabía que apenas tocara el timbre todos los chicos se me acercarían, pero tengo el presentimiento de que no es por eso lo que me preocupó.

Después del toque de timbre, no pasaron ni tres minutos, y ya se me acercó un chico, y he de decir que el más guapo de los que he visto hasta el momento.

-Hola, eres Annabeth, ¿verdad?- Lo fulminé con la mirada, digo, ¿es en serio?

-Lo dije frente a toda la clase.- Respondí cortante.

-Lo se, sólo quería ser amistoso, sé lo que significa ser nuevo.- Le di una mirada extraña, sobre todo porque sólo quiere ser amistoso, sí claro, haré como que te creo.

-¿A qué te refieres?-

-Antes de entrar a esta escuela, cambiaba todos los años.- Abrí los ojos, a mi me pasaba algo parecido antes de conocer a Luke.

-¿Por?-

-Me consideraban problemático.-

-¿Y ya no?- Me llamó la atención el tiempo pasado que usó.

-No, aprendí a canalizar mi energía a otras cosas.- "También yo" Pensé. "Lamentablemente, no de la manera que todos esperarían."

-Fascinante, pero no quiero llegar tarde a clase. Adiós.- Salí caminando muy rápido del salón, pero no pasaron ni 10 segundos cuando el chico estaba a mi lado de nuevo.

-Espera, puedo llevarte si quieres, ¿cuál es tu siguiente clase?-

-Mira, ya sé que es lo que pretendes, y no me interesa.- Pensé que sería mejor si lo corto de raíz antes de que crea que lo aliento a ir tras de mí.

-Dudo que lo sepas.- Dijo divertido, lo que obviamente, me irritó.

-Eres el típico chico popular que desea que todas caigan a sus pies, pues ¿qué crees? Yo no lo haré.- Dije, se quedó mirándome fijamente unos segundo, me pregunto por qué.

-Fallaste.- Dijo y me sorprendí. -Te me haces familiar, y quiero saber de dónde, pero si prefieres perderte en los pasillos, pues, adelante.- Dijo y comenzó a alejarse de mí, podré ser muy orgullosa, pero no sé dónde estoy parada, necesito ayuda.

-Espera. Matemáticas, esa es mi siguiente clase.- Dije claramente vencida.

-Sígueme.- Dijo sin mirarme. Dudé un segundo, pensando que me quería perder por los pasillos, confié en que no lo haría y lo seguí. -Este es.- Dijo mirándome. Pero que hermosos ojos azules los que tiene.

-Gracias ah...- Ahora me di cuenta de que no me sabía su nombre, creo que lo notó, porque me lo dijo.

-Percy, Percy Jackson.-

¡No puede ser! De repente, recordé al chico con el que soñé a los 12 años, y era exactamente igual a él, ¿acaso de verdad es él? ¿existe el chico de mis sueños?

De seguro me puse pálida, y sentí un malestar en el estómago, de seguro fue por la sorpresa, traté a toda costa que no se notara lo que me pasa.

-Gracias Percy.- Entré en el salón y el me siguió. Con que amistoso, ¿eh?. -No es necesario que me acompañes al asiento, aquí no me voy a perder.- Volví a mi actitud de antes.

-Lo sé, pero no me pienso ir.- ¿Qué se cree este chico?

-Pero...- Me interrumpió.

-No faltaré a clases sólo porque no te agrado.- ¡Soy una idiota! No hay una forma mejor de describir mi error en este momento. Me sonrojé, de eso estoy segura.

Iba a disculparme con él, pero no me dejó, se fue a sentar con otro chico justo en el momento en que abrí la boca.

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