KissCam -Sergio "Kun" Agüero y tu-

Capitulo 41

5 meses después...

Salí de mi casa y cerré la puerta con llave. Subí a mi auto, lo encendí y comencé a conducir.
Hoy iría al médico para saber el sexo de mi bebé. Pude haberlo hecho hace un mes, pero estuve muy ocupada y no tuve tiempo.
Entre al establecimiento médico, y, como ya había apartado una cita, me senté en la sala de espera a, obviamente, esperar mi turno, y también a esperar a que llegara Sergio, quién tuvo que entrenar desde temprano.

—_______ Müller— escuche mi nombre y me levante.

—Soy yo— dije mientras me acercaba a la señora que había mencionado mi nombre.

—Ya puedes entrar, linda— me dijo la señora.

—Mi novio está un poco retrasado, ¿Le podría decir que entre cuando llegue?— pedí.

—Claro— contestó— ¿Como se llama su novio?— me pregunto.

—Sergio Agüero— respondí.

—Haré entrar al señor Agüero apenas llegue— me dijo la señora sonriendo.

—Gracias— le sonreí de vuelta.

Entre al nuevo consultorio de mi doctora. Apenas me vio me sonrió, y yo también a ella.

—Hola ______— me saludó con una sonrisa. Se acercó a mí y me dio un abrazo.

—Hola Jime— correspondí a su abrazo.

—¿Como has estado?— me pregunto mientras nos sentábamos.

—Muy bien— respondí— ¿Y tú? ¿Qué tal todo?— pregunte.

—Excelente— contestó— Estuve esperándote desde hace como un mes— comentó.

—Lamento no haber venido a mi cita, es que he estado muy ocupada en estos días— me excusé.

—Tranquila, pero no vuelvas a faltar, sabes que cada mes tienes que venir— me dijo. Yo asentí— ¿Y Sergio?— preguntó.

—No ha llegado— conteste haciendo una mueca.

—¿Lo esperamos?— preguntó.

—Por favor— respondí y ella sonrió.

La doctora y yo estuvimos hablando por unos veinte minutos, pero yo no era la única paciente que tenía la doctora, por lo que no pudimos seguir esperando a que Sergio se dignara a aparecer, cosa que no sabía si me enfurecía o me entristecía, en serio quería que Sergio estuviera aquí conmigo, él nunca ha faltado a ninguna cita desde que me entere que estaba embarazada.

Fuimos hacia la camilla que estaba en el consultorio, me acosté en esta, y justo cuando la doctora comenzó a pasar un frío gel por mi vientre, se abrió la puerta y pude ver a Sergio entrando al consultorio. Sonreí al verlo.

—Lamento llegar tarde, pero Pep se excedió hoy con el entrenamiento— dijo Sergio mientras se acercaba a nosotras— Hola doctora— beso la mejilla de la doctora.

—Hola Sergio— lo saludo la doctora.

—Hola, amor— me saludó y beso mis labios.

—Hola— le sonreí— ¿Ya podemos seguir?— le pregunte a la doctora. En serio estaba ansiosa por saber que sería el bebé.

—Si, sigamos— contestó la doctora.

Luego de haber echado el gel en mi vientre, la doctora comenzó a pasar una maquina sobre este.

—Miren ahí está el bebé, hoy si lo podemos ver clarito, no como las otras veces— comentó la doctora mientras señalaba el monitor en donde se veía la imagen del bebé.