15| "Te necesito"

148 28 30
                                    

Siento que no tengo fuerzas ya
Para saltar y agarrar el sol
Y por más que yo lo intente
No me escucho ni mi propia voz
Ya no sé si he vivido
diez mil días o un día
Diez mil veces
Y te sumo a mi historia
Queriendo cambiar las pérdidas por creces
Shakira

Siento que no tengo fuerzas yaPara saltar y agarrar el solY por más que yo lo intenteNo me escucho ni mi propia vozYa no sé si he vivido diez mil días o un díaDiez mil vecesY te sumo a mi historiaQueriendo cambiar las pérdidas por crecesShakira

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Si odio los viajes largos mas odio las mudanzas, eso de meter todo dentro de cajas y vaciar gavetas enteras de cosas que ni te acordabas que existían es extenuante, pero más triste son las despedidas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Si odio los viajes largos mas odio las mudanzas, eso de meter todo dentro de cajas y vaciar gavetas enteras de cosas que ni te acordabas que existían es extenuante, pero más triste son las despedidas.

Oficialmente nos mudamos de estado y me divido en sentimientos igual que todos los Géminis del mundo, una parte se quiere quedar aquí, en los edificios de la ciudad y en el calor de lo que fue mi hogar por doce años. Pero mi otra parte se alegra porque voy a vivir más cerca de los tíos, los abuelos maternos y sobre todo de Íker.

Despedirme de mis amigos fue todo un caos, parecía que me marchaba a Neverland (aunque casi) Samantha lloró por toda una semana mientras Ray la consolaba pero muy mal, el día antes de irme me despedí del cara de huevo y créanme cuando les digo que no creo que se olvide de mi cara nunca.

No podía faltar el drama, así que lloré al despedirme pero les prometí que los visitaría siempre que visitaba a mis abuelos paternos. Esa fue otra historia, los abuelos lloraron a mares y yo con ellos, no se como voy a vivir sin las galletas horneadas de la abuela y los cuentos de piratas del abuelo. Adelantamos las vacaciones de invierno para la mudanza, mami y papi acordaron con la escuela que enviarían todos los exámenes finales del último mes. Ellos habían realizado un paquete de tareas más terrorífico que las películas de Saw.

El chico que imaginé mientras dormíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora