En un fin de semana, Marinette paseaba con el pequeño Louis en su carriola por las calles de París. El cielo se encontraba radiante, acompañado de un leve viento, lo que hacía que el exterior se volviera relajante.
—Esto sí es un fin de semana, ¿no lo crees, Louis? —habló Marinette.
Entonces negó con la cabeza y se dio un leve golpe en la frente.
—Qué tonta soy, todavía no aprendes a hablar —murmuró.
—No creo que seas una tonta, Marinette —Tikki mostró su cabeza por el bolsillo.
—Lo sé, gracias por el consuelo, Tikki —rio.
—A propósito, ¿no saldrás más con Luka? Recuerda que él dijo que quería verte este fin de semana.
—Sí, es sólo que necesito dedicarme más a Louis, ¿entiendes? Mis padres han salido últimamente y alguien tiene que hacerse responsable.
Tikki sonrió.
—Además… Creo que… Me siento mejor que nunca… Ya ha pasado tiempo desde…
Marinette bajó la mirada. No, todavía no se sentía mejor.
—¿Estás bien, Marinette? —preguntó la kwami.
—Sí… Bueno… Tengo que aceptar la realidad —siguió caminando—. Adrien tiene a alguien más en su vida que lo hará feliz y yo…
Volteó a ver a Tikki, quien la miraba directamente a los ojos.
—Tengo todo lo que necesito, a mis padres, a Alya, a Louis… Y a ti, por supuesto —sonrió.
—Eso es muy lindo, Marinette —se alegró.
Un grito se escuchó, sobresaltando a las presentes. Algunos cuidadanos huían asustados, mientras que otros corrían hacia al lugar del incidente.
—¿Qué está pasando? —se preguntó la azabache.
Marinette se apresuró junto con la carriola para ver lo que estaba pasando, hasta que se detuvo en seco. Un gran edificio se estaba incendiando, a causa de una explosión inesperada.
—¿Crees que sea un…?
—¿Akuma? Tal vez —respondió Marinette hacia su kwami—. ¡Tengo que ayudarlos!
Así que Marinette llegó hasta un callejón, permitiendo que Tikki saliera del bolsillo.
—¿Qué pasará con Louis? —preguntó Tikki.
—No tardaré, lo dejaré aquí por un tiempo —respondió Marinette—. ¡Tikki, motas!
El aura rosada rodeó el cuerpo de Marinette, hasta convertirse en su álter ego. Antes de irse, volteó a ver a Louis y movió la carriola hacia una esquina.
—No te preocupes, pequeño, volveré enseguida —le dijo acariciando su mejilla.
El pequeño soltó un sonido de su boca como respuesta y Ladybug sonrió, hasta ir al edificio. Los bomberos comenzaron a llegar y algunos ciudadanos lograron salir con leves heridas.
—¿Qué fue lo que pasó? —Ladybug se acercó a uno de los policías.
—Al parecer hubo un incidente, hasta ahora no sabemos la causa, pero temo que hay varios atrapados en el edificio —respondió el policía.
—¡Iré a rescatarlos!
—¡Espere, es muy peligroso!
Ladybug no lo escuchó. Sabía que debía salvar a las víctimas atrapadas en el edificio. Logró entrar por una ventana, observando la gran cantidad de fuego que comenzaba a expandirse. Esquivaba lo mejor posible para encontrar a los atrapados.
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Un Pequeño Milagro [Adrien & Marinette]
FanfictionCuando Marinette Dupain-Cheng es rechazada por Adrien Agreste, su gran amor, pronto la presencia de un pequeño milagro podría cambiar su vida, pero sobretodo una oportunidad para regresar con esa persona a quien amó, a pesar de que algunos estén dis...