Crystal: El Campamento Para Chicas

Lash

Luego de haber llegado a la primera cabaña, los nervios invadieron a Lash. Mientras las ottas veinticuatro chicas se acomodaban en una fila rápidamente, Lash tuvo que hacer un esfuerzo para moverse.

Por lo que sus padres les habían dicho a ella y a Hazz, sabía que la cabaña que le tocara sería su principal hogar durante aquellas vacaciones. Sin embargo, lo único que podía pensar era que no le tocara la misma cabaña que a Anna.

Nerviosa, Lash se colocó entre su hermana y una chica de un cabello rubio casi blanco. Katia se colocó al frente de todas, lista para seleccionarlas.

      —Bueno, empecemos por la cabaña blanca —dijo sonriendo, mientras las observaba a todas—. Ustedes dos.

Lash miró asustada a donde había señalado Katia, y observó a dos chicas de dieciséis años avanzar hacia donde les indicaban. Algo aliviada, Lash soltó un suspiro.

Las otras tres chicas resultaron ser de la misma edad que las anteriores. Al instante, Lash se percató de que la mayoría de chicas ahí tenian entre diez y diecisiete años, y que muy pocas eran de su edad.

Katia se volvió hacia las demás, mientras las cinco chicas seleccionadas la miraban.

      —Bien. Las chicas que fueron elegidas deberán llevar sus pertenencias a su cabaña y permanecer allí hasta la hora de cenar. Como algunas ya deben saber, el comedor se encuentra en aquella dirección —Katia les señaló un gran cabaña de madera de dos pisos, la cual era como tres veces mas grande que la primer cabaña.

La guía se volvió hacia las demás, que miraban a las que no habían sido elegidas. Lash pensó como fue que habían terminado juntas y parecían conocerse desde antes.

     —Este año seleccioné a las chicas de la Cabaña Blanca debido a que llevan cuatro años yendo a este campamento —dijo, como si le hubiera leído el pensamiento— Siempre trataré de que terminen con alguien que les agrade, pero sepan disculparme si no es así.

Lash pensó en Natalie, y agradeció que no estuviera a su lado en aquel momento. Aquella chica podría ser simpática y tener unos hermosos ojos azules, pero Lash aún seguía enojada con ella.

Katia volvió a mirarlas a todas antes de hablar, y Lash se sintió nuevamente nerviosa.

     —Creo que ya es momento de elegir a las integrantes de la segunda cabaña —dijo, mientras les señalaba una cabaña naranja a la distancia—. ¿Que tal... ustedes dos?

Lash se quedo inmovil, mientras miraba a su derecha. Katia había señalado a la chica del cabello blanco... y a ella.