Snap Baby ↪ ChanBaek / EXO

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Estacioné el auto frente a la plaza. No estaba entre mis planes hacerlo definitivamente, pero había terminado por sucumbir a la curiosidad y espiar a Chanyeol. Siempre había tenido miedo, una vez me puse a pensar y era verdad, Chanyeol estaba enamorado de Sojin y aun así la había dejado por mí. ¿Qué podría tener de especial yo para que no me lo hiciera también? Su ex era una chica preciosa antes de volverse una loca contra nosotros y Somi también era muy atractiva, aunque me negara a pensarlo.

Caminé por el pasto del parque hasta un árbol desde donde pude verlo. Chanyeol se encontraba sentado con Somi en uno de los bancos con una carpeta en la mano. Esta le señalaba ciertas cosas y pude notar varios gestos sugerentes de su parte que me daban a entender claramente que buscaba seducir a mi marido. Al parecer este no lo notaba ya que seguía hablando y sonriendo como un idiota. Ante aquello me sentí aún más tranquilo, él no parecía responder a sus coqueteos, pero tampoco rechazarlos. Somi deslizó una de sus manos por la pierna de Chanyeol, muy cerca de su entrepierna y este solo tragó en seco, observándola asustado. Ella no perdió tiempo y quitó la carpeta, colocándose sobre su regazo con habilidad para besarlo. Se movió sobre él, seguramente rozándose contra el bulto de Chanyeol quien no se movía, no la apartaba y pude ver como tomaba la cintura de la chica. Las lágrimas caían de mis ojos y no pude contener un grito de dolor que salió de mí. Pude ver como Chanyeol corría a la maestra, observándome con los ojos completamente abiertos antes de ponerse de pie.

—Baekhyun, por favor, no es lo que tú crees. —dijo, acercándose a mí, pero yo solo lo aparte, golpeando su rostro con una cachetada mientras me alejaba entre lágrimas, entrando al auto para salir de allí.

Al llegar a casa lo primero que hice fue comenzar a preparar las maletas para alejarme de ese lugar. No podía seguir en la misma casa que Chanyeol, no podría ver su cara después de todo aquello, pero no sabía que hacer con los niños así que fui hacia la habitación de ellos. Ambos se encontraban jugando y me miraron con preocupación al tenerme frente a ellos.

—¿Qué pasa, mami? —preguntó Jian, acercándose a mí para rodearme con sus bracitos al igual que su hermano. —¿Por qué lloras?

—Estoy triste. Papi y yo peleamos y me iré unos días para descansar. ¿Ustedes quieren quedarse aquí o vendrán conmigo?

—Nosotros queremos irnos de vacaciones con los dos, así podrán descansar.

—Entiendo, amor, pero no se puede. —acaricié las cabecitas de los dos, mostrando una leve sonrisa entre lágrimas. — Creo que será mejor que estén aquí con papi, que no pierdan su casa ni a sus amigos, que todo siga normal. Llamare al abuelo, ¿sí?

Los pequeños asintieron contentos y Junmyeon no tardó en venir a casa. Había estado de viaje mucho tiempo y se encontraba mucho mejor. Luego de unas palabras de aliento subió al cuarto de los niños conmigo y luego de darles muchos besitos baje con las maletas. Volvería a verlos, no dejaría solos a mis bebés, pero necesitaba salir de allí pronto. Tomé mi maleta y salí de la casa, preparando luego el auto, pero antes de subir una mano me detuvo.

—Baekhyun, ¿Qué haces? Todo fue un malentendido, yo no quería eso, de verdad perdóname, prometo explicarte todo, pero no me dejes.

—Lo siento, pero estoy muy seguro de lo que vi, Park, no quiero escucharte ni un segundo más.

—¿Qué pasara con los niños?

—Vendré a visitarlos cuando estés en el trabajo, enviare dinero para una niñera que también me asegure que no estarás por aquí. Adiós, Park, suerte con la maestra esa.

Subí al auto, ignorando el llanto de Chanyeol quien intentó abrir la puerta e incluso ponerse delante del auto para que me detuviera, pero nada funcionó. Me dolía muchísimo dejarlo, pero más me había dolido su traición.