Epílogo / Extra

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—Ya basta, papá, déjame ir a clases.

—Es que mi pequeño esta tan grande, ambos lo están. —Chanyeol se mantenía con el celular en su mano, tomando fotos a Jisung mientras este intentaba huir con sus maletas al interior de la universidad.

Después de varias idas y vueltas se había decidido por mudarse al campus ya que Moon le había comentado lo agradable que era vivir dentro de este sin tener a padres molestos a tu alrededor. Quizás nosotros no éramos tan molestos, pero lo compadezco por tener que soportar a Luhan en su casa todos los días. MI amigo se había vuelto mucho más quisquilloso y se lo pasaba todos los días criticando a Sehun y peleando con Moon por la limpieza del lugar y ni hablar de lo que tenía que sufrir Mina por haber pegado posters en su pared.

—¡Chanyeol! Trae de nuevo a los gatos, ¿a quién se le ocurre traerlos de paseo? Te lo dije, no son perros.

Corrí tras el idiota de mi esposo, sosteniendo a cuanto gato me fue posible. A pesar de que Jaemin había fallecido unos años atrás, habían quedado a nuestro cuidado uno de sus hijos y ahora este había tenido crías, por lo tanto, según Chanyeol, Jian no se sentiría solo cuando su hermano dejara la casa.

—No me agrada esto de que Jisung se quede. —dijo su hermano, quien, por cierto, ya era mucho más alto el mayor. — ¿A quién voy a molestar ahora?

—Descuida, en un par de años más te vendrás conmigo y escaparas de ellos.

—¡JISUNG! —la hija de Sehun apareció corriendo, lanzándose sobre nuestro hijo para dejar un beso en su mejilla. A pesar de todos los años que habían pasado, seguía insistiendo en salir con él, pero Jisung se negaba, aunque ahora que vivirían en la misma Universidad tenía la esperanza de por fin conseguirlo. — Espero que nos toque muy cerca, es una lástima que nos dividan, pero créeme que iré a visitarte cada día.

—No te tocará porque comparte habitación conmigo y yo no te dejaré entrar, piojosa. —Taeoh se acercó a ellos, dejando algunas de sus maletas en el suelo mientras Jongin cargaba con las otras. — Será mi habitación también y vete sabiendo que tienes prohibido hasta pisar la alfombra de bienvenida que pondré.

—Voy a visitar a Jisung como me sea posible, ya verás.

Pude divisar una figura acercarse a todos, rodeando a Mina con uno de sus brazos antes de saludar al resto amablemente.

—¿Ya se acostumbran a la Universidad?

—Moon, peluchito, acaban de llegar, no los agobies. —Mark se encontraba junto a él, habían decidido mudarse juntos a un departamento cerca de allí ya que estudiaban medicina juntos y seguían siendo pareja a pesar de los años.

—¿Peluchito? Chanyeol, ¿Por qué tú ya no me dices así? —pregunté, golpeando el hombro de mi esposo mientras este fingía dolor.

—Pero si tienes un apodo lindo

—Que últimamente te las hayas tomado con decirme ballenita azul no es lindo.

—Pero es que tus rollitos son como flotadores

—Aquí lo único que va a flotar va a ser tu cabeza.

—Y la de Sojin, tío. Su hija va a venir a estudiar con Jisung, Taeoh y Mina, suerte con este año.

La presencia de alguien más nos interrumpió y me sorprendí al ver a Momo con pareja, sinceramente creía que nunca iba a abandonar la idea de perseguir a Moon, pero al parecer había ocurrido.

—Mina, tu deberías seguir sus pasos. —dijo una voz detrás nuestro y Moon corrió a los brazos de su padre, rodeándolo con estos.

—Te extrañé, ¿Qué tal estuvo el viaje?

—Digamos que no es fácil recorrer un nuevo país con estos dos peleándose todo el tiempo.

—Es tu culpa por ser polígamo, idiota. —acotó Luhan, golpeando la nuca del chico antes de saludar a su hijo.

La relación de Luhan y Moon había tardado demasiado en mejorar y luego de varios psicólogos, charlas y convivencia se había solucionado por lo menos hasta quererse.

Si alguien se pregunta a que se refiere Luhan con polígamo pues sí, es eso. Luhan se rehusó a volver a China y tuvo uno que otro desliz con Sehun, haciéndosele imposible dejarlo para el menor y, para sorpresa de todos, Lisa terminó por aceptarlo y se estableció una especie de triángulo amoroso entre ellos. Era extraño, pero les iba bien así que nadie opinaba nada.

—Creo que yo también debería probar la poligamia, a Jongin ya se le está cayendo todo.

—Pero si estoy en la flor de la vida, Soosie.

—Estas en la flor de la idiotez, yo necesito un macho que me ate en la cama y me haga sentir vivo.

—Cuando lleguemos a casa te hare sentir vivo.

—Juro que ya me estoy acostumbrando a oír estas cosas cada vez que llego. —la voz de Jongdae no pasó desapercibida ni mucho menos el griterío de sus siete hijos. Si, siete. — Xiumin ya vendrá, creo que se olvidó a uno de los niños en casa.

—Como llevas esto de criar tantos hijos?

—Me va tan bien como a Lay en la vida solo que sin dinero.

—Crear una sociedad con Suho le ha salido bien.

—Yo creo que es porque al otro le da morbo ese rollito de los socios, aunque solo le deje hablarle.

—La vida nos sonríe a todos. —anunció Sehun, tomando a su mascota para cargarla. —Excepto a Chanyeol.

—¿Por qué dices eso? Mi vida va bien, Baekhyun se sigue entregando a los placeres carnales así que no me quejo.

—Lo decía porque te está sangrando el rostro en varias partes. ¿Te atacó tu manada de gatos?

El gigante corrió hacia el auto, yendo por desinfectante antes de volver con nosotros para despedirse de los pequeños. Todos ya habían crecido y teníamos que dejarlos ir, aunque fuera entre lágrimas. Separarse de una parte de tu familia es difícil, pero sabes que es por su bien, que debes dejarles crecer y trazar su propio camino para conseguir la felicidad, una como la que todos nosotros tenemos, quizás a nuestra loca manera, pero felices, a fin de cuentas.

Chanyeol tomó mi mano y me sentí fuerte, amaba tanto a ese hombre, que me daba valor, amor, una felicidad inmensa y me había otorgado los dos mayores tesoros que alguien pudiera desear.

Snap Baby ↪ ChanBaek / EXODonde viven las historias. Descúbrelo ahora