Love is power.

XI. ¿ Black or White?.

- Mantente quieta y expira Kathleen, no quiero hacerte daño.- dice concentrada en sacarme el tubo de la garganta. Ruedo los ojos claro que se el procedimiento para desintubarme. Christine ríe por lo bajini, apoyada en la pared con los brazos cruzados sonriendo socarrona ante mi situación, la fase de sentir pena por mi pasó justo en el instante en el que me desperté.

Mi equipo estaba mirando, todos y cada uno de mis carísimos empleados estaban sin hacer nada, observando algo que si no fuese por mi mejor amiga podría hacerlo más rápido que Morris, pero en su opinión no estoy en condiciones de sacármelo.

Toso fuertemente y una arcada me remueve el estómago. La cabeza me duele casi tanto como me quema el abdomen, estoy quemada por dentro, y no me refiero a la furia que siento en estos momentos, me refiero al veneno que ha creado ampollas por todo mi tubo gástrico. Está confirmado que intentaron matarme, he de decir que con efectividad, he estado inconsciente durante cinco largos y pesados días.

Me han drenado sangre para que el veneno desapareciese de mi sistema pero es como si se hubiese volatilizado, no sabemos que maldito veneno es. Mirándolo por el lado positivo, he tenido suerte por primera vez en mi vida, el cóctel de diferentes antídotos que me inyectaron, uno de ellos, me ha hecho efecto.

- No puedes hablar durante tres o cuatro horas y de comer ni hablar, ya lo sabes, y también sabes que pasará si no lo haces, así que atente a las consecuencias.- me advierte Natalie.

Me llevo las manos al cuello, la liberación de haberme quitado el tubo del esófago.

- Doctora Zheng, vigilela, seguramente se pondrá a gritarle a las enfermeras, cuando vengan a ponerla los calmantes.-bromea Davison, mi mejor amiga sonríe y se acerca a la camilla, apoyando la mano en el colchón. Me mira y frunzo el ceño.

- No prometo nada, puede que sea más peligroso dejarla conmigo.- río por primera vez en días y un pinchazo se instala en mi pecho, tengo que toser.- ¿ Puede moverse?.- ellos dos asienten en seguida, entonces me fijo en un Charles extrañamente callado y en tercer plano con la mirada perdida. Christine se da cuenta del desvío de mi atención a mi empleado. Se aclara la voz.- Charles, ¿ que piensa?.- levanta la mirada y la fija en mi. Se separa de la pared.

- Estoy pensando en todo lo que pasó, el procedimiento, el veneno, cómo este actuó.- se acaricia la barba pensativo.- Si no encontramos el antídoto correcto, podría darle otra crisis y seguramente esta vez no tendría tanta suerte.- explica lo que yo me temía. Christine se tensa a mi lado y frunciendo el ceño dirige la mirada hacia cada persona de mi equipo.

- Entonces, no sé que coño hacen aquí.- ellos se sorprenden ante sus cortantes palabras, esa es una de las cosas que no aconsejo, no hay que poner nerviosa a mi mejor amiga.- Salvarla.

[...]

Estaba trabajando en mi nuevo portátil, un increíble aparato de última generación que me había regalado mi novio, ya que el otro lo había arrojado su amiga contra la pared de mi despacho. Aún así este portátil era demasiado, un Macbook Pro, creo que no ha salido al mercado todavía, aunque no me extrañaría que Damon tuviese acciones en Apple. Este regalo grita dinero, poder, control y excepcionalidad, probablemente me estará vigilando por la cámara de la web cam.

Me dejo caer sobre la camilla, desde que me desperté no puedo concentrarme mucho tiempo seguido. Resoplo aburrida y frustrada, odio no poder hacer nada, además, Christine, está babeando en las sábanas de mi cama, tiene la cabeza al lado de mi pierna y lleva así mas de una hora. La pantalla del ordenador se enciende y una sonrisa irónica aparece en mis labio cuando leo la notificación.

¿Que pasa, tesoro? ¿Aburrida? Tu único dueño 12.30

Enseguida fijo la mirada en la cámara y ruedo los ojos negando con la cabeza.