Enamorada De Las Jauregui (Camren) (Editando)

Llevarte A La Cama (Parte 2)

*Camila Cabello*

-Yo creo... existe...
-Deja de pensar, Lauren, Limítate a sentir. No te preocupes, te acostumbraras, solo necesitas un poco.

Lauren siguió mirando mis labios

-Esto es absurdo-Murmuró

Y lo era, absurdo, irreal, peligroso. Mi corazón latía con tanta fuerza, que temí sufrir un infarto de un momento a otro. Pero Lauren parecía estremecerse cuando la bese de nuevo, deslizando la lengua por sus labios, de una manera erótica, sensual. No podía moverse y sentía como si estuviera ardiendo por dentro. Era una extraña y deliciosa tortura.

-No pares, creo que me gusta –Murmuró Lauren. Y La recompense con otro beso.

*Narrador omnisciente*

Camila deslizó la lengua ante sus labios abiertos, haciendo que viese puntitos de luz, ante los párpados cerrados. Y luego se apartó, murmurando su nombre como si le gustara mucho, haciendo que sonara como una caricia. Parecía fascinada mientras apartaba el cabello de su cara.

-Eso ha estado muy bien, pero no puedes estar besándome todo el rato-Lauren sabia que tenia que hacer algo para romper aquel hechizo.
-Tú no sabes lo que puedo hacer.
-¿Y cuando lo descubriré? –Susurro Lauren, asombrada de su propia temeridad. Experimentaba una extraña sensación de libertad, como si aquel momento estuviera predestinado, como si fuera inevitable. Camila tenía razón, aquello no era nada que no quería.

-¿Te gustaría?.
-Si, lo haces tan bien como me besas, por supuesto.

Camila rió, echando la cabeza hacia atrás y, al hacerlo, revelando la columna de su garganta.

-Aún no te he besado de verdad.
-¿Eso no era un beso?
-Sabes tan bien...-Murmuró Camila, buscando sus labios de nuevo.

Lauren no entendió el resto de sus palabras porque las dijo en otro idioma, pero las caricias de su lengua no necesitaban traducción. Y ella le devolvía los besos con desesperación sin saber lo que hacía pero incapaz de resistirse. Luego, cuando eso no fue suficiente, enterró los dedos en su cabello, y arqueo la espalda para estar más cerca. Se besaban con desesperación, como dos seres hambrientos, y cuando por fin se apartaron las dos estaban sin aire. Si la soltaba, Lauren estaba segura de que acabaría en el suelo.

-No me sueltes, no creo que pueda permanecer de pie.
-No voy a soltarte –Prometió ella, tomándola en brazos para llevarla al sofá. La deseaba como no había deseado a nadie, pero quería alargar el momento.

Lauren parecía una fantasía imposible a la luz del atardecer, pensó, mientras acariciaba su cabello.

-Te deseo tanto –Murmuró, colocándose sobre Lauren.

La íntima presión sobre su vientre hizo que Lauren se estremeciera. Aquel era el momento, el que había imaginado durante toda su vida, el que había pensado que no llegaría nunca o peor, que llegaría sin que se diera cuenta. Pero sus miedos eran infundados. Aquello no era algo que pudiera perderse e incapaz de esconder su deseo por más tiempo tiró de ella, para sentir el roce de su piel.

-Eres preciosa, Lauren-Murmuró Camila, mientras le quitaba la blusa. –Sé lo que quieres Lauren.

Camila apartó el sujetador de Lauren, para meterse un rosado pezón en la boca. La sensación era indescriptible, y Lauren, sin pensar, hundió los dedos en su cabello castaño, y se entregó al exquisito placer de sus caricias. No se cansaba de tocarla y metió la mano debajo de su blusa para acariciar su espalda. Los salvajes latidos de su corazón la hacían vibrar de la cabeza a los pies mientras Camila seguía besándola, desnudándose y desnudándola al mismo tiempo.

Lauren decidió que había sido entonces cuando su cerebro dejo de funcionar y el instinto ocupó su sitio, el momento en el que todo lo que fuera Camila había dejado de existir.
Se rindió totalmente al ansia que sentía por ella, respondiendo instintivamente a sus caricias, besándola tocándola por todas partes, mordiendo su cuello. Camila tomó su mano entonces y la puso sobre sus labios. Se inclino para besarla ardientemente.

Cuando tomo su cara entre las manos y la miro a los ojos, vio en ellos el mismo deseo, que debía haber en los suyos.

-Es perfecto
-Lo será

Camila intentaba mantener el control, pero era una pelea que estaba perdiendo. Cuando metió la mano entre sus piernas y el roce de sus dedos, hizo gemir de placer supo que no podía esperar más. Y afortunadamente, tampoco podía hacerlo Lauren.

-Por favor, no puedo...

Camila se coloco entre sus piernas.

-Mírame, Lauren

Lauren miró a Camila, mientras humedece dos dedos en su sexo. Cuando Camila, entró en Lauren se le escapo un gemido, pero fue muy breve y estaba concentrada en la increíble sensación de tenerla dentro.

-Eres tan estrecha Lauren.

Lauren arqueo la espalda para sumergir los dedos en su cabello. No hubo palabras. Sus cuerpos se comunicaban a un nivel primitivo que eliminaba la necesidad de hablar. Sus piraban, jadeaban, pero sin decir nada hasta que llegó el momento de la explosión.

-Mírame. Quiero verte. Quiero verlo en tus ojos

Lauren abrió los ojos en el momento del orgasmo. Y Camila se dejó caer sobre su pecho, estremecida.

-Supongo que sabes lo que haces Camila. Ahora déjame demostrarte lo que sé hacer yo.

Lauren busco sus labios en un beso rabioso y exigente, explorando y mordisqueando. La conexión era asombrosa, ella ajustándose ahora a su posesión, Lauren intentando mantener el control. Lauren levantó las manos para acariciarle los pechos mientras se percataba casi del todo...para entrar en Camila, iniciando un ritmo que la llevó al clímax. Se escuchó el gritar de Camila mientras se venía, pero su orgasmo fue tan poderoso que era incapaz de concentrarse en nada que no fuera su propio placer.

Cuando Camila le puso una mano en el muslo, Lauren perdió su control. Sus curiosos dedos encontraron un sexo totalmente húmedo. Lauren encontró un punto especialmente sensible.

-Lauren...
-¿Si?

Inclinandola cabeza para buscar sus labios. Lauren tuvo que hacer un esfuerzo sobrehumanopara dominarse. Trazo su ombligo con la lengua y los labios y sujetando suscaderas, inclino la cabeza un poco más. Decidió darle ternura y atención estavez. Camila arqueo la espalda al notar el primer roce de su lengua en el punto mássensible y, unos segundos después, se rompió en un  clímax que la envolvió como una ola gigante.

Lauren tiro de ella. Mientras buscaba sus labios en un beso largo y tierno que enseguida se volvió apasionado. Se coloco sobre ella, atrapando sus dos manos con una suya, y levantándose por encima de su cabeza. Con su mano libre acariciaba sus pechos evitando sus pezones, excitándose deliberadamente.

Cuando sus gemidos le dijeron que estaba preparada para ella, metió una mano entre sus piernas. Su deseo se había vuelto un torrente que necesitaba ser liberado cuanto antes. A toda velocidad, humedece sus dedos, y le abrió las piernas con una rodilla, mirándola a los ojos.

-Dime que me deseas, Camila –Le ordenó, con voz ronca –Suplícame

Ella abrió las piernas un poco más pero, Lauren se aparto.

-Dilo, Camila
-Por favor, Lauren, Te deseo.

Lauren entro en ella. Y supo entonces que no sería posible ir despacio, nunca sería posible, con Camila. La penetro y embestía con fuerza, una y otra vez, hasta que una ola gigante se llevo a Camila en un gemido ahogado. Se dejo caer arriba de Camila, cubriendo su cuerpo.