Capítulo 18

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Luego de que se haya largado una terrible tormenta, empecé a caminar y un carro pasó cerca mío salpicándome completamente, el querido automóvil me había bañado en agua, grité con todas mis fuerzas: "maldito idiota, eres un imbécil, fíjate la próxima vez" dije arrodillandome mientras lloraba, era el peor día, era el peor momento de mi vida, por dios, estaba completamente sola, ningún taxi venía, no sabía como venir y no encontraba la parada del autobús, el auto freno y bajó un chico de aproximadamente diecisiete años, claramente un poco mayor que yo, y me dijo:

-Lo lamento, ¿cómo estás? No te vi, ¿te encuentras bien?

-Me encuentro perfectamente, obvio que si, evidentemente un imbécil acaba de pasar por encima mío y me salpica toda con agua, mientras me muero de frío el idiota pregunta si me encuentro bien, bueno por supuesto que me encuentro bien- respondí sarcásticamente

-Wow niña si has tenido un mal día no es mi culpa- respondió el joven

-¿cómo sabes que tuve un mal día?-pregunté curiosa

-Niña yo también tuve mal día y sé lo que sientes; así que oye no tienes porque tratar mal s las personas que solo quieren ayudar.-dijo el chico

En verdad él tenía razón.

-Claro tienes razón, disculpa, pero tu debiste tener cuidado también.- dije enojada

-Wow ambos tenemos ciertas justificaciones ¿de acuerdo? ¿Quieres que te lleve?- dijo él

No sabía ni su nombre, su edad, donde vivía, no podía arriesgarme a viajar con un extraño.

-¿Te subirías al carro de una persona que casi te atropella y además te salpica agua?-pregunté

-Vamos sube ¿o te quedarás aquí parada? Sube niña no tengo todo el día.

-¿cómo es tu nombre?dije

-Jack ¿y el tuyo?-dijo él

-Olivia. Espera un segundo, ¿Supones qué me subiré al auto de un extraño y llegaré a mi casa en el carro de un desconocido?-pregunté confundida

-Supongo eso por algo pregunto niña.-respondió él

-Supones bien entonces Jack.-dije subiendo al carro

Jack me agradaba y sabía que no era un loco sicópata que me iba secuestrar, le dije que me dejara a tres calles de mi casa, no quería arriesgarme con mis padres, ellos suponían que yo estaba en la casa de Luisana. Llegué a mi casa, saludé a mis padres y fui a bañarme, lo único bueno que me pasó en el día fue haber conocido a Jack, él era agradable y sináptico, ojalá me lo vuelva a encontrar.

El diario de OliviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora