DANGEROUS BOY |H.S|- TERMINADO-

capitulo 4.

Entre a clase sentándome en la última silla como de costumbre, el comportamiento de Josh se había estado cruzando a cada momento por la cabeza, no era que me preocupaba pero en la mañana tenía la cara pálida muy distraído y eso no era normal para un orgulloso y siempre animado Josh - el timbre sonó informando que ya era salida, abrí los ojos quedándome admirada el tiempo que había pasado, mi celular comenzó a timbrar

-Hola duende- recordé que él tenía que venir y hablar con Josh, supongo que esa conversación no se realizaría

-Ven de frente a tu casa – cortó la llamada, no me dejo decir ni un vale, sin más que decir camine viendo los mensajes de mis padres–

¨Espero no escuchar ni una mierda de ti, _______ no estoy de humor¨ de mi querido padre

¨Ya estamos llegando hija y seria asombroso que compraras unos cuantos vestidos, tenemos una cena. mamᨠclaro madre, amo ir de compras

Mi celular cayó al piso por un movimiento de mal gusto, alguien choco por milésima vez en el día conmigo – Joder! – dije alzando mi aparato, me vio con el ceño fruncido – ten cuidado por donde caminas – espete al bipolar maldito rulozo de la mañana, acaso era un guardaespaldas de una de las gemelas, rio sin gracia, me aleje

-no estoy de ganas para que me pidas mi número, no quiero follar a mocosas creídas, apártate quieres- solté una carcajada

- si creías que hice esto apropósito déjame decirte que eres un completo imbécil sin razón, jamás pediría el número de un chofer o guardaespaldas por el hecho que esta bueno –

- mimada, metete en tus asuntos y aléjate de mí vista – señalo hacia la calle

-y si no quiero que me vas hacer-? –puse mis dos manos en la cadera, ni mis padres me hablan así, con furia me cogió del hombro apoyándome a un auto

- no juegues conmigo hoy linda – gruño, puse los ojos en blanco – no pongas esos ojos y ve a casa cómprate una vida y si no quieres meterte en graves problemas -apretó sus labios con desesperación, retenía el aire

–No la atoques! – su sonrisa diabólica apareció con tan solo escucharlo

Mierda. Me arrepentí de provocarlo, Josh gracias pero no te lo diría

-mira pero quien se dignó en aparecer –rio descaradamente soltándome, retrocedí y los deje a los dos, cuando estuve lo suficiente lejos y de la nada se apareció un auto a toda velocidad y bajaron dos hombres que se acercaron a Josh y le comenzaron a golpear –solté mi cartera y corrí para ayudarlo, era mi aliado aunque me cayera pésimo no podía dejar que le hicieran daño, cuando estuve cerca unas manos me rodearon mi cintura alejándome –suéltame! -grité con todas mis fuerzas –pero eso le incentivó a juntarme más a su cuerpo -suéltame imbécil! .pero no emitía ni un sonido, los hombres lo seguían golpeando sin piedad y para agregar algunos chicos del colegio solo corrían y otros se quedaba a ver pero nadie se dignaba ayudarlo, Josh sangraba por todas partes

-déjenlo malditos! O se las verán conmigo -grité, pero ni caso de mi existencia hacían, me llevo a otra parte para no ser vistos

-cállate maldita estúpida! -gritó alterado, tenía los ojos rojos de tanta ira, me dio escalofríos, eran tan intimidante

-suéltame, por favor -susurré suplicando de dolor, él se quedó viendo mis ojos y se dio cuenta que me estaba apretándome la cintura con todas sus fuerzas y soltó suavemente

-dile a tu noviecito que para la próxima no se demore en sus asuntos -dijo con voz ronca y se zafó, subió al auto negro con los hombres que lo estaban esperando –gire mi cuerpo y corrí donde Josh, él estaba tratando de ponerse de pie con ayuda de chicos

–en que mierda te metiste! –trate de ayudarlo a pararse

-ahora no... estoy para reclamos... -hablo con la voz entrecortada

-necesitas ir a un hospital- lo lleve al auto

-No! Niall me llamo, él quiere que hablemos... él nos está esperando – talvez Niall ya le había contado –

.-eso puede esperar, ahora necesitas cocerte la ceja - le impedí

-Dije que no _____! eso es más importante, si no hablamos, nos patearan el trasero, está comenzando nuestro juicio Smith – ambos nos quedamos pensando, asentí llevándolo al asiento trasero del carro y cerré con fuerza, subí rumbo a mi casa después de unos diez minutos nadie decía nada y no pretendía hablarle mucho menos, era un desconsiderado pero tenía razón, cuanto más planeábamos como destruir a los Miller más rápido terminaría esta tortura.