Oye...Yoongi Hyung ♦ Sukook ♦

De Noticias Inesperadas

–¡Hyung, espéreme!

–No tengo todo el día para esperarte Kook.

Y este es Min Yoongi, un idiota con un ego que sobrepasa cualquier límite propuesto, creyendo que es el mejor. Es así como muchas personas lo califica, pero si era a mi a quien le preguntaban acerca de su comportamiento, solo podía decir cosas buenas que sorprenderían a cualquiera.

Hyung y yo nos conocemos desde que éramos unos niños, debido a que nuestros padres eran excelentes amigos, ya saben esas típicas promesas de "Cuando seamos mayores y tengamos hijos ellos también serán amigos y seremos una hermosa familia".

Pero no siempre se puede conseguir lo que se quiere, y esos niños que debían ser amigos terminaron odiandose durante mucho tiempo.

Eso, al menos hasta que cumplimos 12 años, donde nos dimos cuenta de que coincidimos en muchas cosas y que podríamos llevarnos mejor de lo esperado.  El fue el primero en muchos momentos y experiencias de mi vida; mi primer amigo, mi primer confidente y ahora, mi primer amor.

Y es así como llegamos al presente, donde mi Hyung tiene 22 años pero actúa como si tuviera 50; en las tardes suele pasar por mi casa, donde duerme horas y horas mientras yo termino mis deberes.

Justo como ahora.

–Hyuuung...

–¿Que quieres mocoso?  –Preguntó con notable pereza en su voz.

–Estoy aburrido ¿No quieres hacer algo?

–¿Que te parece si jugamos a no hablar? Podrías ser un excelente jugador.

–Estoy hablando enserio.

–Yo también Jeon.

Suspire resignado.

Cuando Hyung decidía llamarme "Jeon" era porque estaba en su límite, próximo a golpearme, y ser golpeado por él no parecía ser muy agradable.

Eramos polos totalmente opuestos; a él todo le daba igual, mientras que a mi me emocionaba cada situación. Yo siempre quería ayudar a los demás, mientras que él, por su lado, no quería relacionarse con nadie en ninguno de los ámbitos.

Yo lo amaba y él no a mi.

–Jungkookie...

Esperen, esperen, esperen...¿Me dijo Jungkookie?

–¿Q...qué pasa?

–N...necesito decirte algo... –Habló mientras se levantaba de el sillón y me miraba fijamente.

–¿Porqué tartamudeas? ¿Estas nervioso?

–No es una situación que sea muy fácil de sobrellevar.

–¿Porqué no me dices de una vez que es lo que te pasa Hyung?

–Veras...hay alguien que me gusta –Agacho su cabeza, dando a notar cierto sonrojo de su parte. 

¿Qué?