Baby Boy ❤ (Fanfic - Wigetta)

Capítulo 23 ❤

- ¿Quieres hacer que Samuel sufra? ¿Qué pague por todo lo que nos hizo? - camino Estefanía mirando directamente a Samantha. - Ese bastardo se merece sufrir por el dolor que nos hizo pasar. - se detuvo y colocó su mano sobre el hombro de la chica delante suya. Mirándole directo a los ojos. - Mírate Samantha, en lo que te haz convertido a causa de Samuel... Cuantas cirugías te hiciste en tu cuerpo para que al final él ni siquiera volteara a mirarte. - se dio la vuelta para quedar mirando por una ventana que daba directo al bosque. - Fuimos engañadas, ilusionadas y después tiradas a la basura como un juguete. - apretó sus puños. - Ahora él debe estar con su novio... Qué asqueroso. - al decir esto Samantha levantó su rostro mirando a Estefanía. Completamente indignada.

- ¿Qué dices? - hablo con un tono de voz quebradizo.

- ¿No lo sabías querida? - giro un poco su rostro, mirando de reojo a Samantha. - Él se consiguió a alguien más. Un chico llamado Guillermo. Un maldito que vino para robarse el corazón de Samuel y arruinar tu plan de volver a conquistarlo... Con ese tipo en el camino jamás podrás hacer que Samuel te haga caso.

- ¡¿Por qué?! - grito Samantha. - Yo hice todo lo posible para gustarle. Yo, yo... - rompió en llanto y callo al suelo. - Esto no puede ser verdad.

- Lo es Samantha. - camino rodeando a la chica en el piso. - ¿Tu crees que yo no intente volver a conquistarlo? Pero ese desgraciado sólo me ignoraba. Intente llevarmelo a la cama en una fiesta, pero se negó. Samuel me ha olvidado. Oficialmente he quedado en el pasado. Pero... - se agachó quedando a la altura de Samantha. - Tú aún tienes la oportunidad de hacerlo trizas. De destruirlo. - sonrió mostrando su blanca dentadura y haciendo relucir ese labial rojo mate que llevaba en sus labios. - Vuelve a meterte en su vida, descubre su debilidad. Y cuando ya la tengas, acabalo. Hazlo sufrir como él una vez lo hizo contigo. No tengas compasión. - Samantha sólo podía escuchar todo lo que aquella chica decía. - Recuerda todas las noches que lloraste por él, recuerda la humillación que te hizo pasar. Como te ilusionó, te enamoró y al final te traicionó... - se levantó y arreglo su vestido rojo. - Tienes la oportunidad de destruirlo, en tus manos. Yo seré tu ayudante, por que también quiero verlo sufrir. - tomo su saco negro de cuero y se lo colocó. - Si estas de acuerdo con esto, ya sabes donde encontrarme querida. - dijo y se retiro haciendo que sus tacones resonaran en esa gran casa lejos de la ciudad.

Estefanía era una gran manipuladora. Y que mejor que utilizar a Samantha, una chica débil, indefensa y totalmente manipulable para acabar de una buena vez con Samuel.

...

- Despierta. - pico su mejilla. - ¡Samu! - dijo Guillermo alargando la "u". - ¡Despierta! - volvió a picar su mejilla con su dedito índice.

Él menor estaba levantado desde las cinco de la mañana. Y ahora intentaba despertar a su querido novio. Probablemente serían las seis y cuarto pues aún se veía obscuro afuera.

- Umm, duérmete es muy temprano. - susurro Samuel adormilado.

- No. Guille tuvo una pesadilla. - hizo un puchero. Y se acercó más a Samuel.

- Amor, intenta volver a dormir. - tapo su cabeza con una almohada.

- No. - chillo. - Iré por agua. - se levantó de la cama y tomo la playera de Samuel. Está le quedaba bastante grande, llegándole arriba de las rodillas. Su cabello estaba bastante desordenado y sus mejillas notablemente pintadas de un color carmín.

Comenzó a caminar por el pasillo cubriéndose el pecho con ambos brazos, intentando mantenerse en calor. Al llegar a la cocina se sirvió un poco de agua en un vaso y con mucho cuidado de no caerse volvió a su habitación.