Love in Nanba | Fanfic Español

Capítulo XIII

  —U-Uno... —el heterocromático gemía, agarrándose a mis hombros, arqueando la espalda al sentir las embestidas—

—¿Te duele? —pregunté un poco preocupado, me detuve un momento y lo miré—

—Claro que duele, idiota —cerró los ojos con fuerza. Había olvidado que esta era su primera vez, así que tenía que ser cuidadoso, aunque era evidente que le doliera— 

—¿Quieres que vaya más despacio? —negó con la cabeza y abrió un solo ojo—

—Continúa, no es nada —hablaba como podía. Yo sonreí y lo besé, volviéndome a mover. Al oprimir mis labios contra los suyos, los gemidos no salían, así que estaba más tranquilo para que no nos escucharan. Sería bastante vergonzoso que alguien nos encontrara, sinceramente—

Jyugo se apresuró a cambiarse, a la vez que yo estaba tranquilo, poniéndome mis prendas una a una. Él me miró, como si estuviera pidiéndome que me cambiara más rápido, aunque no hice caso a su mirada y terminé a mi tiempo. En cuanto nos dirigíamos a la celda, pude notar una expresión rara en su rostro.

—Jyugo, ¿estás bien? —él asintió, sin mirarme— No parece.

—Me sigue doliendo, un poco —hizo una mueca y me miró con media sonrisa— No es nada, o eso creo.

Rock y Nico estaban dormidos, en una posición bastante tierna. Rock estaba abrazando al menor, el cual estaba de espaldas a él, sonriendo aún estando dormido. Ambos sonreímos al verlos, abrazándonos inconscientemente. 

—¿Ellos ya lo habrán hecho? —¿enserio estaba preguntando eso? o mejor dicho, ¿acaso le interesaba? El otro día habíamos hablado de lo mismo—

—No lo sé —me separé del abrazo que nos estábamos dando— Además, no me imagino a Nico en esa situación, ya te lo dije —lo miré y él asintió. No sé porque se preocupaba tanto por eso, era un tema que a él no le incumbía y no era necesario que nosotros separamos—

—Nico es muy unido a Rock, ¿no crees? —cambió de tema. Ahora que lo decía, era verdad. Jamás lo habíamos visto tan apegado a Rock y ahora míralos, durmiendo juntos y abrazados—

—Sí, además es muy tierno, es normal que Rock no se haya resistido a él—hablábamos en susurro, ya que no queríamos despertarlos—

—¿Crees que Rock fue el primero que se enamoró? —Jyugo simplemente los miraba, haciendo cada vez más preguntas—

—Es posible—En realidad no lo sabía, pero por lo que había visto y escuchado, lo más probable es que él se haya enamorado antes que Nico— Nico no tenía muy claros sus sentimientos, ¿recuerdas?

—Pero poco a poco se fue enamorando tanto como Rock, es muy bonito —dijo eso y sonrió. No había escuchado nunca a Jyugo decir palabras como esas. Era cierto, eran muy bonitos juntos y eso no lo podía negar nadie—

—Aunque, Rock es muy celoso y eso puede ser un problema —me crucé de brazos y también los miré, se veían muy tranquilos—

—¿Celoso? —preguntó confundido—

—Sí, Rock defiende mucho lo que es suyo —giré la vista a Jyugo, que en ese momento se encontraba mirándome— Hablé con él el otro día, por lo que se ve, no le gusta que otros se acerquen demasiado a Nico, sólo nosotros.

—¿Acercarse demasiado? ¿a que se refiere? —volvió su vista a ellos nuevamente—

—Abrazarlo o incluso besarlo, detesta que hagan eso —mantuve los brazos cruzados— Aunque no sé que es lo que piensa Nico, no sé si le molesta que otros se acerquen de esa forma a Rock, o simplemente le da igual.

—Habría que preguntarle, pero dudo que responda.

—Nico es bastante abierto con ese tema —cambié la posición de mis brazos, apoyando las manos en mis caderas— No creo que le importe hablar de eso, y menos si somos nosotros.

Se nota que somos muy curiosos, y por eso decidimos preguntarle a Nico sobre lo que pensaba de que otros se acercaran tanto a Rock. Esperamos a que estuviera solo, para evitar que sea más incómodo de lo que ya era.

—Nico, ¿podemos hablar contigo? —sonreí amablemente y él asintió—

—¿De que quieren hablar, Uno-kun?—¿Acaso Nico nunca estaba de mal humor?—

—¿Qué opinas acerca de que otros se acerquen mucho a Rock? Que lo abracen y esas cosas —Jyugo, ¿podrías ser menos directo? el menor simplemente nos miró—

—En realidad no me molesta, o no demasiado —se puso a pensar— Pero tampoco me agrada—Nico también era celoso, pero no tanto como Rock. No podía enojarse, simplemente no le agradaba la idea de compartirlo. La diferencia es que Rock podía llegar a pelearse por eso. Cuando hablé sobre el tema con él, me di cuenta de que de verdad detestaba que tocaran a Nico, en cualquiera de los sentidos—

—Rock es muy celoso con respecto a ti, ¿no crees? —quizás estábamos siendo demasiado directos, pero era una duda que queríamos resolver, y ya que estábamos...— 

—Sí, pero él dijo que solo quería protegerme—sonrió— Aunque... no me gusta que se enoje conmigo—bajó un poco la mirada, haciendo que sintiera un poco de pena por él—

—Créeme que no se enoja contigo, simplemente reacciona así porque tiene miedo —sonreí. Él no parecía entender mucho, aunque me siguió la corriente—

—Ya veo—sonrió nuevamente— ¿Algo más que quieran preguntarme? —en ese momento llegó Rock, por lo que ambos nos miramos, negamos con la cabeza y nos paramos para saludar al mayor e irnos. No sabíamos de qué podían hablar, pero tampoco nos incumbía. Además, teníamos cosas pendientes por hacer—

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—¡Rock! —el peliverde saltó hacia mi para abrazarme en cuanto me vio entrar. Yo sonreí y le devolví el abrazo, viendo como Uno y Jyugo se retiraban de la celda, por lo que aproveché y le di un corto beso al menor—

—¿Estás tan feliz de que volviera? Me fui menos de una hora —lo miré sin dejar de abrazarlo—

—Igualmente te extrañé —él bajó la mirada y luego la subió para mirarme a los ojos— Oye... Rock...

—¿Que sucede? —sonreí— 

—Acabo de hablar con Uno-kun y Jyugo-kun...—susurró— Sobre que eras celoso con respecto a mi, y que tenías miedo.

—¿Miedo? —al principio no lo entendí, pero luego lo relacioné con lo que había dicho acerca de que era celoso—

—Sí, miedo, pero no entendí muy bien a que se refería, por eso te estoy preguntando—me miró preocupado, como si estuviera diciéndome no tengas miedo—

—Creo que sé a lo que se referían —sonreí abrazándolo con más fuerza— Sí, si tengo miedo, muchísimo —Nico me miró con aún más preocupación, por lo que lo tomé por los hombros y lo miré directo a los ojos— Tengo miedo de perderte.