Treinta y cinco

92 14 0
                                    


El hombre se arrodilla frente a mí y comienza a quitar las sogas de mis muñecas, toma mi rostro entre sus manos e inspecciona mis heridas.

-Todo estará bien.

Así creo que es, me estoy diciendo mentalmente y al mismo tiempo agradeciendo por el ángel enfrente de mí. Me ayuda a pararme y me conduce hacia la salida, allí veo a mi familia junto a la de Chris los cuales preguntan por él y alguien responde que escapó.


¿Tenías que ser Tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora