Me traen a una comisaría, me toman declaración y me aseguran protección. El ángel de ojos azules vuelve y se sienta enfrente de mí.
-¿Estás bien? –Pregunta y asiento- No te imaginas lo que hemos pasado buscándote todos estos días.
Me atrevo a pararme y le agradezco con un abrazo.
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¿Tenías que ser Tú?
Short StoryPara un hombre, obtener él rechazo de una mujer puede ser un tiro al blanco en su ego. La venda impuesta por la irrealidad en nuestros ojos puede jugarnos a favor o en contra, la aprovechamos y nos permitimos vivir conforme a lo que soñamos, o atent...