¿¡Como Llegué Aquí!? [TERMINADA]

13-Cargo de conciencia P.2

La guarida estaba silenciosa, como casi siempre que regresaban de las misiones. Konan se despidió de la pelinegra y se retiró a su habitación a descansar.

Ariel caminó tranquila hasta la oficina del "Lider", pensando en cómo le diría a Obito sobre lo de aquel dúo Inmortal.

Las paredes de la guarida tenían una gran humedad por lo que cuando caminabas por allí, la frescura del lugar te invadía y parecías estar en invierno. Más de una vez Sasuke se quejaba silenciosamente de ello, pero Ariel siempre lo calmaba diciendo que solo iban allí una vez al mes.

Rodó los ojos y frunció el seño cuando el recuerdo de la misión que le dió Obito cruzó fugazmente por su cabeza. Para ella era increíble que él desconfiara de tal manera de Sasuke. Si así desconfiaba de él, ni imaginar cuanta confianza tendría en los integrantes de la organización, pero entonces... donde quedaba ella? Realmente Obito confiaba en ella?.

Al llegar a la oficina de Pain, dio tres golpes a la puerta y entró con paso firme y rostro serio luego de escuchar el leve "Pase" que dio Nagato.

Pain se encontraba allí sentado frente a un escritorio grande. En él, habían un montón de pergaminos y papeles, los cuales estaban desparramados en toda la mesa dejando libre solo la parte donde el "líder" estaba sentado.

El rinnegan se posó en ella con la característica frialdad de siempre con la que miraba a todos.

—Aquí esta el informe de la misión y el pergamino que nos mandaron a buscar. No hubo mayor problema en el camino, solo bandidos que quisieron robar dinero y comida.—Lo miró seria mientras entregaba ambos pergaminos en las manos de Pain.—Fuimos lo más sigilosas posible con nuestras técnicas a la hora de utilizarlas, nadie sabe de nuestras habilidades más allá del Taijutsu.—el peli naranja solo se limitó a asentir.

—Alguna interrupcion por parte de ninjas de... Konoha?—Ariel rechinó los dientes en señal de rabia.

—No, ninguna.—soltó rotundamente.

—Bien.—Dio por terminado el tema y se acomodó en la silla y apoyándo los codos en la mesa la miro seriamente.—Tengo entendido que tienes otra misión ahora por lo cuál, antes de que te vallas debo preguntar algo y quiero que me respondas con sinceridad.—Se levantó de su lugar y se acercó a ella mostrándose recto e imponente.—Es cierto que no les dijiste a los de konoha sobre nuestra ubicación?—La chica asintió confiada y segura de si misma.

—Jamás lo hice y nunca lo pienso hacer. Eso sería traición.—la pelinegra sabía que lo que le había dicho a Naruto se consideraba como traición, pero qué más podía hacer. Su plan para que Akatsuki dejara de sacrificar Jinchuriki's ya había comenzado y no daría marcha atrás.

—Bien, ya te puedes retirar.—Enseguida acató la orden y haciendolo con mucho gusto salió de aquel lugar lúgubre y frío.
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Tenía tres días para averiguar que era lo que ocurría exactamente. Si era realmente cierto que Sasuke fue quien dió información de la organización entonces algo andaba mal, o tal vez, quería comunicarse de alguna forma con los Akatsuki.

Tenía entendido, por parte de Zetsu, que había sido él quien estaba en el equipo de búsqueda encabezado por Hatake Kakashi. Debía buscar toda la información que demostrara que Sasuke era quien había abierto la boca.

Tomó las cosas que había preparado sobre la cama y las colocó en orden dentro del pergamino. Era un respiro para ella que Obito no estuviese allí, de igual modo ella estaba tensa y alerta de cualquier pisada que se acercara a la puerta.

Pero su paz duró muy poco, la puerta se abrió de forma un tanto brusca. Ariel intento no darle mucha importancia y hacer sus movimientos con naturalidad. Se colocó los pergaminos en el estuche de la cintura en la parte trasera y luego acomodó su Katana en el lado izquierdo donde normalmente Sasuke la usaba. Se colocó los guantes sin prisa y se ató el cabello en una coleta como la de Itachi pero con el flequillo tapándole el ojo Izquierdo.