~Primer Amor~ [Hiro & Tú] [Terminada]

~Capítulo 21~

___:

- ¿Puedes besarme? -preguntó Hiro, le sonreí antes de pegar mis labios a los suyos. Él me tomó de la cintura profundizando el beso.

Tyler comenzó a llorar y quise separarme, pero Hiro gruñó y choqué nuestros labios antes de separarme.

Me acerqué al bebé y fruncí el ceño cubriéndome la nariz. 

- Tenemos problemas. -dije, Hiro negó con la cabeza. - Sí, lo cambiarás tú.

- ¡No, ____, por favor! -y me metí al baño, cerrando con pestillo. - ¡Eres mala! -chilló él. - No habrá Hiroconda por un mes.

- Oh, no la ha habido por más de un mes, no me importa. -reí cuándo el suspiró. 

Escuché una serie de ruidos y maldiciones, probablemente salieron de mi novio. Salí del baño cuándo escuché que reinaba la paz.

- Ahora dale de comer. -dijo Hiro, nada más salí del baño. Me encogí de hombros y tomé a mi hijo en brazos. 

Me senté en el sofá, y acomodé a Tyler en mi regazo, él de inmediato comenzó a buscar el pecho y liberé uno de éstos. El bebé de inmediato atrapó este en su boca y le comencé a alimentar.

- ¡OUCH! -gritó Hiro, pude escuchar cómo Baymax se inflaba a mis espaldas.

- Hola lindo robot con forma de malvavisco. -dije, Baymax se volteó hacia mí y saludó con su mano. 

- Hola Hiro, en una escala del uno al diez, ¿qué tanto es tu dolor? -preguntó el robot. Reí cuándo Hiro rodó los ojos.

- Uno, Baymax. -respondió el pelinegro.

- Te escanearé. -volvió a hablar el robot. Hiro sonrió. - No hay señales de heridas graves, estás muy sano. -Baymax se volteó hacia mí. - Hola ___, ¿quieres que te escanee?

- No hay problema, Baymax. -me encogí de hombros mientras acomodaba a Tyler contra mi pecho, para que pudiera alimentarse más fácilmente.

No repetiré lo que dijo Baymax. Es muy vergonzoso, pero tiene que ver con mis pechos. Hiro comenzó a reír provocando que yo le mandara una de mis miradas asesinas, paró de reír pero sus mejillas se habían llenado de aire, tratando de aguantar la risa. Le lancé un zapato que esquivó con facilidad. Él quiso volver a aventarlo pero señalé a Tyler. Entonces bajó su arma. El bebé soltó el pecho y me cubrí rápidamente, dando palmaditas en su espalda para quitar el aire. Lo dejé en su carrito y caminé hasta Hiro.

- ¿Por qué, te ríes de mí? -dije, saltando a su espalda y jalando su pelo. El gruñó, tratando de separarse. Ambos caímos en la cama, él sobre mí.

- Te amo. -su vista bajó a mis labios y sonreí. Hiro me besó mientras sus manos se metían dentro de mi blusa, éstas comenzaron a subir, desde mi abdomen hasta mis pechos. Reprimí un gemido cuándo comenzó a dar apretones. 

- Jmm.. ha pasado mucho tiempo desde que no hago esto. -dijo Hiro, volviendo a manosear mis pechos. - Tyler tiene una suerte...

Gruñí y lo volví a atraer hacia mí para pegar mis labios a los suyos y besarlo con pasión. Mis piernas se enrollaron alrededor de su cuerpo y reí cuándo él me levantó, para pegar mi espalda a la pared de la habitación. Bajó sus besos de mi boca hasta mi cuello. Y si gemí cuándo hizo eso. Él ronroneó en mi cuello y sacudí su cabello. 

Mis manos se metieron dentro de su camiseta y acaricié su pecho, la prenda comenzaba a estorbar así que se la quité, al igual que él a mí. Nuestros pechos se pegaron completamente, y yo últimamente no llevo sujetador estando en casa. Hiro jadeó y sonreí, antes de yo comenzar a besar su cuello. Volvió a cargarme, ésta vez besando un poco más allá de mi cuello, al inicio de mis pechos. Y... Tyler comenzó a llorar.

- Tyler... -bufó Hiro, mientras yo me ponía la blusa. - Papá también quiere diversión. -se sacudió el cabello mientras yo acomodaba al bebé en mi pecho.

- Papá tendrá que esperar. -dije burlona, meciendo a mi hijo. Hiro sonrió y me abrazó por detrás, dejando un beso en mis mejillas. 

Re corto, ya sé.