#21- Inseguridad (maratón 2/?)

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Rose.

Toqué a la puerta con esperanzas de que esté en casa. Cuando me abrió sentí nervios y le sonreí, a lo que me copió y me dejó pasar. Nos sentamos en el sillón de la sala.

—¿Que querías?

—Pedirte perdón...en verdad lo siento, fui una idiota, estaba cegada por los celos, la ira, mis inseguridades, sólo quería ser mejor que todos ¿de que sirvió? Sigo siendo la misma idiota...

—Si, lo eres, pero...te perdono.

—Y...también quería saber si amas a esta idiota rompecorazones.

—La ame, si, pero ame a la Rose incorrecta, me engaño y no sé si cambió.

—Lo hice, te lo juro...por favor aceptame, todos cometemos errores, ¿si?

—Pues tu sabías bien que eran errores y los seguiste cometiendo... de todas formas, ¡casi matas a dos personas! Eso no puede ser un error, no, Rose. Anna era feliz, Rubén también, ¿como pudiste...? Más bien, ¿como pude amarte así? Me manipulaste tanto...

—Ya, por favor, en serio estoy arrepentida y cambié, y tengo mucho por hacer para arreglar las cosas, pero necesito empezar por ti o no podré respirar tranquila.

—¿Qué? Ya te perdone aunque aún intento tragarme mi enfado, ¿qué más quieres?

—Que me dejes amarte, Mayra.

Me acerqué a ella y la besé en los labios. No se resistió y me correspondió el beso. Cuando nos separamos me miró con un leve sonrojo y agachó la cabeza.

—Sólo prometeme que cambiaste.

—Cambié, lo prometo. Por ti haré lo que sea.

(...)

Novia es una hermosa palabra cuando  lo cambias por el nombre de May. Estoy tan feliz de tenerla a mi lado, ahora si no la lastimare más ni a otra persona. Desde pequeña se burlaban de mi por mi forma de ser, porque era elegante, o al menos lo intentaba, y porque era educada. Tenía pocos amigos y no todos eran buena influencia, la mayoría de ellos me decían que no debía dejar que los demás me afecten, eso era lo único bueno que me enseñaron.

Siempre me hacían retos o apuestas, "duerme con este", "a que no enamoras a ese", "ilusionalo y déjalo", "haz que engañe a su novia". Parece que yo tenía un don para convencer a las personas, seducirlas, sobornarlas, todo lo que implicara cambiar sus pensamientos a mi favor. Excepto por los míos sobre mi misma.

Tenía esa baja autoestima y mi vida sólo era pensar en lo que pensaban los demás, si se reían, si les gustaba, si se burlaban. Todo era "ellos", sobretodo cuando eran mis amigos esos "ellos".

Pero se terminó. Por fin.

 Por fin

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Cambios Repentinos [2] (#MDFB2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora