Después de una hora de camino hacemos la primera parada y aprovecho para interrogarle.
-¿Por qué hemos venido aquí? -al no obtener respuesta le vuelvo a preguntar- Liam, ¿me escuchas?
A pesar de mi insistencia no responde a mis preguntas, aunque me temo que sé la respuesta. Cuando vi que tomábamos una dirección que no nos conducía a Colinwood lo sospeché, aunque todavía no me puedo creer cómo se le ha ocurrido traerme aquí. Me bajo de la moto para estirar las piernas y me deshago del casco, Liam hace lo propio con el suyo pero permanece sentado en el vehículo.
-¿Dónde está?
-¿El qué? -respondo haciéndome la distraída.
-Ya lo sabes.
-No te lo voy a decir hasta que me expliques qué es lo que pretendes hacer.
-Solo quiero hablar con él y decirle un par de cosas.
-No te creo, estás muy tenso.
-Eso es porque llevo conduciendo casi una hora.
-Por cierto, ¿de dónde has sacado la moto?
-La he cogido prestada.
-¿A quién?
-Eso no importa. Y no me entretengas más y dime dónde está tu antiguo instituto.
-No te lo voy a decir - le digo airada y le aparto la mirada.
-Está bien, yo lo encontraré.
Toma el móvil de su bolsillo y empieza a buscar la dirección. Sé que tarde o temprano dará con l ella pero no pienso ponérselo nada fácil.
En pocos minutos levanta la vista y me guiña un ojo.-¡La tengo! Venga, sube a la moto.
-No quiero.
-Sube.
-Te he dicho que no.
-Está bien, pues espérame aquí que ya me encargo de hacerlo yo solo.
-No serás capaz.
-¿Lo quieres ver?
Se vuelve a colocar el casco y arranca la moto mientras sigo atenta a sus movimientos.-Última oportunidad, ¿subes?
Resoplo y me vuelvo a subir.
-Buena chica.
-Estúpido.
En diez minutos estamos en mi antiguo centro. Liam aparca la moto en la puerta y los dos nos adentramos en el edificio. En conserjería hay una señora de mediana edad a la que no reconozco, supongo que Juan, el anterior conserje, ya se habrá jubilado.
-Buenos días, estábamos buscando a Adrian Meyer.
-Deben esperar veinte minutos hasta el próximo cambio de clase.
-Lo siento mucho pero es que no podemos esperar. ¿Sería posible que usted lo avisara? Es una emergencia.
Esta parece que no se lo termina de creer, pero para mi sorpresa se levanta lentamente de la silla y se dispone a abandonar su garita.
-Esperen aquí, iré a avisarlo.
-Muchísimas gracias - replica Liam de forma educada.
Cuando la perdemos de vista veo cómo Liam avanza rápidamente.
-¿A dónde vas? Debemos esperar aquí.
Viendo que hace caso omiso voy detrás de él. Giramos a la derecha siguiendo el mismo recorrido que la conserje y logramos averiguar en qué clase ha entrado. Liam da una carrera y entra en el aula para mi sorpresa y la de todos los demás. Corro detrás de él para impedir que haga una locura pero llego demasiado tarde, Liam está junto a mi antigua profesora.
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Mi historia y su historia
RomanceMi nombre es Nara. Acabo de mudarme a una nueva ciudad debido al acoso que sufrí en mi instituto. El primer día de clase conozco a Liam Solberg, el chico más espectacular que jamás he conocido. Y me enamoro. Pero él tiene su propia historia, muy dis...