Mi historia y su historia

Capítulo 13

Los días pasan rápido y a penas hablo con Liam. Solo coincidimos en clase pero no en los recreos debido a la liga de baloncesto, la cual por fin acaba hoy. Ya no estamos sentados juntos. Nuestro tutor nos puso en asientos distanciados cuando descubrió, junto con el resto del instituto, que Liam y yo éramos pareja. Todavía no hemos tenido una cita los dos solos, entre los estudios, el voluntariado y el trabajo de media jornada no tengo tiempo para nada más.
Este fin de semana no trabajo, parece ser que mi jefe ha reservado El Café para una celebración privada. He estado toda la semana esperando a que Liam me diga de quedar los dos juntos, pero por más que le doy a entender que estoy libre no lo pilla, o es eso o es que no le hace mucha ilusión el vernos fuera de clase. Intento reunir valor para invitarle yo, pero cada vez que lo consigo los nervios me paralizan, es algo de mí que odio, no me deja avanzar.

-¿Vais a venir a vernos? - nos pregunta Liam a las chicas y a mí en el patio mientras desayunamos.
-Sí, ahora vamos después de comernos el bocadillo -le contesto.
-Vale, pues hoy es la final así que tenéis que animarnos -insiste con un guiño de ojos.
-Eso Nara, sino el pobre Liam se quedará traumatizado si no ve a su chica en las gradas dándolo todo -ríe Alex.
-¿Qué dices? -responde Liam con un codazo en el estómago a su amigo, al cual deja sin respiración.
-Me has hecho daño, ¿Alfonso has visto lo que me ha hecho?
-Es que no sabes cómo es de tímido tu amigo en lo que respecta a las chicas, parece que eres nuevo.

Todos nos reímos y pienso en lo afortunada que soy de poder disfrutar con ellos.

-¿Qué tal con Liam esta primera semana? -me pregunta María una vez que los chicos se han ido a jugar el partido.
-Bien, pero no hemos hablado a solas desde el domingo.
-¿Y vais a quedar este fin de semana? -curiosea María.
-No me ha invitado a salir -contesto cabizbaja.
-¿Cómo que no te ha invitado? ¿Y por qué no lo haces tú? -pregunta inquisitivamente.
-Lo he intentado en un par de ocasiones, pero me resulta imposible. Además me da pánico de que me rechace.
-¡Qué estupidez! ¿Cómo te va a rechazar?, ¡si estáis saliendo! ¿Tú qué piensas Carla? Hoy estás muy callada.
-Bueno, yo ahora solo puedo pensar en qué me voy a poner mañana para mi cita -nos cuenta Carla con una amplia sonrisa.
-¿Cómo? -preguntamos nosotras dos al unísono.
-Pues que mañana tengo una cita.
-Eso ya lo has dicho, la pregunta es ¿con quién?, ¿y cómo ha sido todo?
-No sé si lo conocéis. Se llama Lucas, es de 2C. El otro día me invitó y después de pensármelo he decidido ir con él.
-No sé quién es -le digo mientras me levanto para tirar en la papelera el envoltorio de mi bocadillo.
-Yo sí, -contesta María de un brinco. De hecho está en el equipo de baloncesto de su clase enfrentándose en este mismo momento a nuestra clase, así que vamos. Quiero ver a quién vas a animar -asevera María divertida.

Me he alegrado mucho de que Carla haya decidido salir con ese otro chico, la verdad es que espero que todo le vaya bien, se lo merece.
Todo el tiempo que ha durado el partido he estado dándole vueltas a lo que me ha dicho María, que sea yo quien lo invite. He reunido todo el valor que he podido y he llegado a la conclusión de que lleva razón, no quiero quedarme en casa todo el fin de semana arrepintiéndome de lo tonta que fui por no tener valor a dar el paso. Así que en cuanto finalice el partido bajo y lo invito.

-¡Hemos ganado! -celebra María.

Y su clamor hace que me vuelva a replantear la idea de ser tan lanzada.

-Vayamos a clase, ya ha tocado el timbre -nos informa Carla.
-Id yendo vosotras primero, quiero hablar con Liam.
-Así me gusta Nara. Ánimo - me dicen ambas con el pulgar levantado.

Bajo las gradas y con la mirada busco a Liam, al que encuentro hablando con un par de chicas de otra clase, cosa que me disgusta, pero no quiero hacérselo saber. Me aproximo y las chicas se despiden de él.