Las puertas se abrieron y frente a ellos había un largo pasillo, muy silencioso y solitario, lo que le da a pensar que ella es alguien "importante" para poder estar ahí; atraviesa el pasillo buscando la oficina 4G, las veinte oficinas del cuarto piso se dividían: a la derecha de A-J y a la izquierda de K-T, así que la 4G debería estar casi al fondo a la derecha, se dirigieron directo a ella; al llegar, Chris logra ver la silueta de la oficial dentro y se detiene de golpe tomando el brazo de Eli y acercandola un poco a él.
-- No confíes en esa mujer, fue mandada a reclutarte y hará lo que haga falta para hacerlo -- dice muy serio viéndola directo a los ojos.
Ella lo mira confundida, pero asiente con la cabeza desconfiada y abre la puerta.
-- Señorita Monroe, es un gusto poder hablar con usted de nuevo, veo que se siente mejor y que trajo a su "amiguito" -- enfatizando ésta palabra y sonriendo hipócritamente -- Tomen asiento por favor y digame ¿En que le puedo servir? -- reluciendo una sonrisa más amable para con la chica.
-- Ok -- dice ésta lentamente desconfiada y a la vez sorprendida por los gestos que usó -- resulta que estoy empezando a recordar cosas -- vuelve a ver a Chris quien tiene los ojos posados sobre ella y quien deja escapar una pequeña sonrisa; suspira, elimina cualquier expresión de su rostro y la ve fijamente, con es mirada que era particular de ella, aunque no lo recordara, con esa mirada que hace que hasta el más valiente sienta un escalofrío recorrer por su espalda, esa mirada que ha mandado a muchos a prisión y dice -- ¿Por qué no dijo que era de la agencia central de inteligencia cuando hablamos en el hospital?.
Sonríe -- agencia central, departamento, fue un simple error, soy nueva en el trabajo -- Eli no se inmuta, sabe perfectamente que está mintiendo.
-- ¿Por qué se volvió a presentar si ya nos habíamos conocido antes? ¿Quería aprovechar mi perdida de memoria para dar un mejor "primera impresion"? -- la acusa.
Sonríe hipócritamente -- Me alegra que me recuerde, pero ¿Acaso vino sólo a acusarme? -- dice ya molesta.
-- De hecho no lo recordaba, fue una especulación arriesgada pero gracias por confirmarlo -- su rostro inexpresivo no cambia -- algo más ¿Y su compañero? -- dice volviendo a ver el otro escritorio que se encontraba al fondo en una esquina.
-- Es su día de descanso -- dice girando los ojos hacia la derecha.
-- Así que nos espía, interesante, supongo que no les quedó de otra luego que deje su tarjeta en el hospital ¿Qué tenía? ¿Un chip de rastreo? -- la oficial frunce el seño -- No, también un micrófono -- sonríe victoriosa -- la tecnología es impresionante -- arquea una ceja.
-- Fuera de mi oficina -- dice levantándose de su silla molesta.
-- Por supuesto -- sonríe -- tenga un lindo día -- salen.
Así que la CIA está dispuesta a hacerlo todo para reclutarme ¿Incluso causar un accidente muy bien calculado para que pierda mis recuerdos e intentarlo de nuevo? No, tal vez trataban de materme por alguna razón y hacer que parezca un accidente, pero sobreviví y trataron de aprovechar ese error, tal vez ellos mandaron al chico del hospital para confirmar si recordaba algo ¿Por qué querrían matarme?
-- Como no soy psíquico preguntaré ¿Qué piensas? -- dice el chico mientras entran al elevador.
-- ¿Por qué se reforzarían tanto en reclutarme? Trabajar con ellos es un honor para muchos, ellos se encargan de los asuntos de seguridad nacional ¿Por qué invertir tanto tiempo en una chica? -- le pregunta al fin depositando su confianza en él.
-- Porque tu eres un asunto de seguridad nacional. El último caso que resolviste requería hackearlos, ya que uno de sus altos mandos era tu sospechoso principal para ser "el cazador de brujas" nombre que le pusieron a un asesino serial que sólo mataba mujeres, quemandolas vivas, resolviste el caso, todos te aplaudieron, pero la CIA se quedó resentida y con un poco de miedo, ya que una niña de 17 años pudo hackearlos, podrías destruir la nación si vendías sus archivos a algún país enemigo, eres muy peligrosa para ellos -- ríe.
-- Repito ¿Por qué no sólo desaparecerme? -- pregunta.
Ríe -- eso era muy peligroso, sin alguien como tú, muchos más crímenes ocurrirían, los psicópatas te temen, tu fama te persigue, ya ninguno se atreve a matar por diversión, además si algo te pasaba después de hackear a la CIA es obvio a quien iban a culpar, ya conoces el dicho "Mantén a tus amigos cerca y a tu enemigos aún más cerca".
La oficial no parece alguien con mucha paciencia, seguro se hartó y trató de matarme haciendo que parezca un accidente, ahora sólo debo demostrarlo.
Salen del lugar y vuelven al auto -- ¿A dónde quieres ir? -- le pregunta, feliz de haber obtenido su confianza.
-- Volvamos a la cafetería, aún tengo hambre -- dice con una cara de queja y tocándose el abdomen con una mano.
-- Claro -- entra en la carretera -- Y dime ¿Qué venías a buscar en verdad? -- pregunta curioso ya que no mencionó nada al respecto.
-- Esperaba que me ayudara a saber quienes eran sus principales sospechosos, pero dudo que en verdad esté haciendo algo respecto al caso, ese trabajo le corresponde a la policía o al FBI, además podía ser mentira lo del auto saboteado y todo haber sido un accidente, ya no sé que pensar -- dice llevándose una mano a la cabeza.
Llegan a la cafetería, piden dos porciones de tiramisú y se van a sentar, Eli cierra los ojos, prueba un poco y respira profundo; nada pasa.
-- ¿Huh? -- dice viendo confundida al postre.
-- ¿Qué pasa? ¿No te gustó? Solía ser tu favorito -- dice el chico preocupado de no haber pedido algo que a ella le gustara.
-- No... es sólo q...
La puerta de la cafetería se abre de golpe, entra un chico -- ¿Eli? -- pregunta, viendo a todos lados buscando, la ve al fondo y corre hacia ella, que lo miraba incómoda, éste toma su rostro con ambas manos y la besa -- me alegra que estés bien -- sonríe con lágrimas en los ojos.
Ella lo ve confundida mientras un pequeño tic mueve el parpado inferior de uno de sus ojos.
Y dentro de ella cayó una gota.
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Navegando Por Mis Lagunas Mentales (primera revisión)
Mystery / Thriller¿Te imaginas despertarte un día en una cama de hospital sin recordar aquello que por naturaleza hacías? Como hablar o moverte a voluntad; esa es la situación que Elizabeth tuvo que afrontar a sus tan solo 20 años, luego del suceso que casi se lleva...