Mark había dejado en el hotel a Jack, para que recogiera sus cosas. El volveria en una hora, asique le dejo tiempo para acomodar bien sin olvidar nada. Volvió a su casa, y comenzó a arreglar. Pronto se dio cuenta de que quería darle una buena impresión. Pero no una impresión de amigos... La heladera tenia suficiente comida, cerveza. Arreglo el cuarto de invitados. El cuarto de juegos, y luego de eso, subio de nuevo al auto, en busca de su... de su... bueno, da igual.
Jack lo esperaba, le ayudo a subir su equipaje.
-Oye, Mark... ¿No deberías estar en el evento?
-Quédate tranquilo, chico. Tengo a mis suplentes. Yo ya he trabajado demasiado, necesito mis vacaciones –a Jack le sorprendía lo que un poco de dinero podía hacer. Mark, literalmente, lo tenía todo. Y eso lo comprobó, cuando entraron a la casa. Un hermoso y espacioso garaje, un jardín demasiado bien cuidado. Un hall enorme. Habitaciones espaciosas, y la suya, era un sueño para él. Tenía un escritorio, conexión a internet, una consola, varios juegos en un estante y una cama de dos plazas completamente para él, y un baño privado –Espero que te sea cómodo –dijo Mark, sobresaltando a Jack, que yacía contemplando todo lo que tenía en aquella habitación.
-Es más que suficiente, Mark. De verdad, no hacía falta que hagas todo esto por mi.
-Es un honor cuando se trata de un prodigio como tú –dijo, y puso su mano en su cabello, alborotando el flequillo verde, lo que hizo que se sonrojaran. Ambos. Tener contacto físico, les hacía ponerse incomodos, por lo que los dos intentaron evitar lo más que pudieron eso. –Te dejo para que te instales –Mark cerró la puerta detrás de sí. Jack se sentó en la cama, o más bien, se tiro de lleno en ella. Sintiendo la suavidad de las almohadas y sabanas. Esto era mejor que el hotel. Comenzó a reir, y texteo a sus amigos del otro lado. Dan y Felix se mostraban igual de eufóricos que Jack, y no querían quitarle tiempo en aquella ciudad y con esta oportunidad. Bloqueo el celular, lo dejo a un lado de su almohada, y empezó a sonreir. Esta suerte se le iba a terminar en algún momento, pero iba a aprovechar cada segundo que le durase.
Salio de su habitación, y fue en busca de Mark. Lo raro fue no encontrarlo por ningún lado. Se preguntaba que escondia los rincones de aquella casa. Abrió y cerro puertas, encontró la sala de videojuegos y sus ojos azules brillaron al ver la majestuosidad de la habitación. Se prometio que luego de curiosear un poco mas, volveria a ese paraíso. La ultima puerta que abrió, daba al patio trasero. En cuanto la puerta se entreabrió, un hocico rubio se asomo, olfateando. Jack se sobreasalto, dio un paso hacia atrás y el Golden retriever entro, le salto encima y empezó a olerlo y lamerle la cara. Jack reia, era un... oh, era una perrita muy cariñosa y juguetona. No lo dejaba ir.
-Oh, eres tan linda, mírate –dio un vistazo a la chapa que llevaba grabada en su collar –Chica.
-Le agradas –Chica, al escuchar la voz de Mark, dejo a un lado al peli verde, y fue al encuentro de su dueño, dando un salto para que la reciba en brazos. Mark hizo una mueca –Linda, estas demasiado grande para que te cargue, pero eres mi consentida –la dejo en el suelo y le dio una galleta para perros, con la cual la perra estaba contenta.
-Es una linda. Por cierto, uh... Podríamos, quizás... ¿usar el salón de videojuegos? –se notaba timido.
-Pero por supuesto que si. Ven, tengo algo que te encantara –hizo una seña para que lo siguiera. Entraron al salón, donde había sillones dispuestos, un pequeño mini bar que Jack no había visto antes, un mando en el sillón central, que dedujo era de Mark. Se notaba que aunque tuviera todo, era muy solitario, y se sentía bien poder hacerse compañía mutuamente. Él tampoco había compartido con casi nadie (excepto PewDie y Dan), su pasión por los juegos. Pero este tipo era un completo fanático. Jack se emociono, cuando Mark puso entre sus manos un mando color verde.
-Oh, estos son edición limitada. Que suerte tienes –dijo, mientras examinaba el objeto con entusiasmo.
-Pues, si lo quieres, es tuyo –articulo el peli negro, esbozando un enorme sonrisa. Jack irradio alegría en aquel momento, perfilando una sonrisa de oreja a oreja. Pronto, Mark trajo un par de cervezas y refrescos, algunas botanas para pasar el rato con los videojuegos –Elige el que quieras, vamos a ver de que estas hecho, muchacho –Mark estaba emocionado por compartir por primera vez en mucho tiempo su gran pasión. Para su sorpresa, Jack escogió Rocket League. Era un juego en el cual había mezclado futbol con automóviles, muy entretenido. Pasaron un tiempo con ese, haciendo bromas, divirtiéndose como dos niños. Luego pasaron a las cervezas, a jugar Mortal Kombat X. Los dos eran muy buenos, Mark de vez en cuando se distraía para examinar de reojo al muchacho sentado a no mas de dos metros de el, sonriente, con sus ojos azules sumamente brillantes y llenos de energía. Con esas mejillas rosadas debido al efecto de las cervezas. Y Jack se daba cuenta, aunque no quería admitirlo, también le observaba. Mark no era mucho mas alto que el, de rasgos asiáticos, ligeramente bronceado (bueno, Jack estaba palido hasta las nalgas), su complexión física era bastante atlética y la ropa que traía en aquel momento, una camiseta no muy ajustada y unos jeans, que dejaban a la vista sus bíceps trabajados y parte a la imaginación de su pecho. Los jeans contorneaban su trasero y permitían ver el bulto debajo de su pelvis. Se ruborizo, al darse cuenta de lo que estaba mirando. Quizás eran las cervezas, pensaba.
Pasaron las horas, y pasando la medianoche, Mark recibió un mensaje de Tyler:
"Hey, bro, ven a mi casa. Tenemos diversión y un par de muchachas. Ya escuche que has pedido vacaciones, hay que festejar"
Mark se quedo pensativo. No quería dejar solo Jack, podría llevarlo, pero quizás el ambiente le incomodaba. No perdia nada preguntándole.
-Oye, Jack, ¿quieres venir a una fiesta? –el muchacho pensó un par de segundos. No tenia nada que hacer, y podría cambiar un poco el aire luego de estar todo el dia jugando.
-Esta bien –los dos se pusieron en marcha, cada uno duchándose en sus respectivas habitaciones, se cambiaron y se encontraron en el hall.
Nota: Hola! Se las debia de ayer T.T asi que espero que disfruten su fin de semana.Besos a todos y todas <3
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Prohibeme Pensar en Ti
FanfictionNovela Septiplier Dos hombres, Jack y Mark, ambos con algo en comun, se conocen en un evento de videojuegos. Ambos, con el tiempo descubriran que no los une una simple amistad. Nota: el lugar donde sucede la historia puede ser donde vos quieras, muc...