Capitulo 6

98 11 0
                                    

La casa, en la que se daba el festejo, era bastante más grande que la de Mark. Música electrónica, rock, mezclas. Parecia divertido. Gente bailando en los balcones, hombres y mujeres mayores que Jack, alcohol por todas partes y por ahí se divisaban algunas pastillas.

-¡Ahí esta... m-mi hermano! –se acerco un tipo alto, de cabello rizado, abrazando a Mark. Se notaba lo alcoholizado que estaba.

-Tyler, gran fiesta, ¿eh? Este es Jack, un beta –Tyler examino al chico. Y una arcada le gano, vomitando sobre las zapatillas de Mark.

-Dis-disculpa, hermano. Adentro es una puta locura, ¡y todavía no son ni las 4 de la mañana! –se alejo gritando y tambaleándose hacia donde se ponía lo mejor de la fiesta.

-Agradable, como siempre –bufo Mark, mirando sus zapatillas, sacudiendo su pie para sacar el resto del vomito, o bueno, lo que podía –Ire al baño a intentar sacar esta mierda. Ve a buscar algo de beber mientras.

Jack vio como se alejaba Mark por el pasillo de la casa, y el se dirigio a la barra en la parte de atrás de la casa. Contaba con una piscina amplia, donde había muchas chicas nadando, riendo, y todos los hombres fuera, tomando fotos de besos lésbicos. Todo estaba fuera de control en aquella casa. Se acerco a la barra, donde un muchacho que rondaba los 25 años, le atendio.

-¿Qué te sirvo, niño? –hizo énfasis en la palabra niño. Solo tenia 19, pero su físico quizás le hacia ver mucho menor. Pidió dos whiskies dobles con hielo. Al momento se los trajo, Jack tomo uno, y diviso a lo lejos a su acompañante. Mark le vio y levanto la mano en señal de que le esperase allí. Lo bueno es que no permaneció solo demasiado tiempo, a cada minuto la fiesta parecía descontrolarse aun mas. Justo antes de que Mark llegara donde Jack, un hombre de unos 35 años, alto y sumamente alcoholizado se acerco a la barra junto al chico.

-Eh, tu. Ven, ayúdame con esto –Jack dudo, pero se acerco un poco para ver. Saco una especie de polvo de una bolsita de plástico y coloco un poco sobre la mesa –Junta un par de líneas. -El pobre no sabia que hacer o como. Pero llego su salvador. Mark separo las líneas, y el otro se esnifo una por una. Jack miro a Mark y le señalo su whisky. El de cabello negro tomo el vaso y lo choco contra el de Jack.

-No te preocupes, si te sientes demasiado incomodo podemos irnos a otro lado –le dio una sonrisa de lado.

-No, no. Estoy bien, solo que... no estoy familiarizado con las drogas. Realmente nunca había visto nada asi de cerca –Mark comprendia. Era solo un niño. Y el, por el contrario, había llevado su vida por aquel lado lujurioso e insano. Probando de todo, dejando al azar llevarle a terminar en moteles con mujeres de las cuales no sabia ni sus nombres. De cierta forma, el siempre había creido que aquella vida llena de lujos y vulgaridades le llenarían tal vacio existencial, y ciertamente era solo por un rato. Cuando los efectos se pasaban, volvia a ser el miserable hombre de negocios e hijo de un multimillonario. Por su vida había pasado tanto.

-Es normal sentirse abrumado. Yo también lo habría estado a tu edad. Pero... mi vida tomo un rumbo mas descarriado que el tuyo –sonrio, triste, mientras tomaba un sorbo a su whisky, comprobando en efecto que estaba fuerte.

-¿Has probado de eso? –se referia a la cocaína que aun estaba inhalando el otro hombre.

-Miento si te digo que no, Jack –bebio otro poco mas, con el que se termino aquel whisky. –Ven, vamos a pasarla bien, de seguro hay gente interesante por aquí.

La fiesta se torno un poco mas subida de tono, pronto Jack se empezó a sentir mas alegre de lo normal, y Mark estaba allí sentado a su lado con cerveza y personas a su alrededor ofreciéndole drogas. El se negaba, debía estar bastante despierto, no quería cometer locuras o que su acompañante lo pasara mal. Jack se levanto del sillón y camino tambaleándose hasta el pasillo del baño, encontrando parejas besándose desenfrenadamente, gente tomándose selfies, otros tirados por el suelo debido a la ebriedad. Llego al baño, y cerro la puerta. Apenas vio el retrete, poso su cara allí y vomito. Sentía un ardor por todo su pecho, debido a la bilis. Metio su mano al bolsillo del pantalón y mirar la hora. Eran las 7 a.m. En que momento habían pasado las horas, no lo sabia. Y escucho que abrieron la puerta, en ese instante solo alcanzo a escuchar su nombre saliendo de la boca de Mark.

Mark levanto a Jack del suelo frio del baño. Estaba completamente desmayado, o dormido. No podía saberlo con exactitud, y tenia olor a alcohol y vomito. La fiesta se empezó a descontrolar mas de lo debido. Y Mark saco a Jack de aquel lugar. No valia la pena que pasara otro mal rato. Lo subio a la parte de atrás del auto, aun a costa de que el viaje le causara nauseas al pobre Jack y ensuciara la cubierta.

Entró el auto al garaje y miró al chico que yacia recostado en el asiento trasero. Con su complexión atlética, no le fue difícil volverlo a levantar para llevarlo dentro de la casa, abrió su habitación y lo llevo a la ducha. Le saco sus prendas, solo dejándole su bóxer y lo metio en la bañera. Abrió la llave del agua caliente y la entibio con agua fría. Jack empezó a reaccionar de a poco. Mark se había arremangado su camisa, y le pasaba con una esponja el agua caliente por la espalda de Jack.

-Mh... -hizo un gesto de incomodidad –Mark, llévame a mi cama, por favor.

Hizo lo que Jack le decía, lo levanto de la bañera, lo envolvió en su bata, puso su brazo alrededor de su cuello y salieron del baño. Pero el de pelo verde vio la cama de Mark, y allí se dirigio. El otro hombre, intento secarlo un poco antes de meterlo entre las sabanas. Se sonrojo al ver el bóxer azul de su compañero. La proximidad era sumamente amenazadora, pero no podía dejarlo con esa prenda mojada, se rasparía todo. En un esfuerzo enorme, le saco sus boxers, y lo metio entre las sabanas de su cama. El iria a dormir en la habitación que era de Jack, para no molestar su sueño. Antes de irse, le echo un ultimo vistazo al muchacho que yacia tranquilo en su cama, desnudo, abrazando ahora una almohada. Mark sonrio al verlo. Cerro la puerta. Se dirigio a la otra habitación, se quito la ropa, y en aquel instante, noto una terrible erección al dejar que sus jeans se desajustaran.

-Carajo –dijo, y aun estando asi, se obligo a dormirse.


Nota: hello, my darlings! i'm back, jajaja en fin. debo dejarles este capitulo, asi durante la semana adelanto algunos otros. quizas suba mas seguido, todo dependera de que tanto les este gustando :D quizas el miercoles o jueves vuelva a pasar por aqui. Bueno, feliz incio de semana mi gente linda :3

Prohibeme Pensar en TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora