Capítulo O2

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—Hola, preciosa —respondió con una sonrisa arrogante en sus labios.

—Pensé que no llegarías, te estaba esperando.

—Pues aquí estoy, preciosa. —la tomó de la cintura atrayéndola hacia él—. Llegó por quien llorabas.

Sin importarle nada, la besó. 

—¿¡Jane!? ¿Que haces besando a este tipo? —se escuchó la voz de un chico detrás de ambos jóvenes. Jane se separó del falso Kendall mirando a la persona que los había interrumpido. Dándose cuenta que era su mejor amigo, Niall Horan.

—¿Niall? —sonrió impresionada y corrió a lanzarse a sus brazos. Él la recibió encantado pero no olvidaba cómo los había encontrado a los dos—.  ¿Qué haces aquí?

—Vine a visitar a mis padres y me encontré con esto —la miro un poco decepcionado, esperando una explicación de lo que acababa de presenciar.

—Él es Kendall, mi cita de ésta noche —dijo acercando a Kendall hacia donde ellos estaban—. Kendall, él es mi mejor amigo en todo el mundo, Niall Horan.

—¿Qué hay? —soltó el rubio abrazando a Jane por los hombros. A lo cual Niall lo miró con ganas de arrancarle la cabeza por restregarle en sus narices que tenía a Jane comiendo de la palma de su mano.

—Pensé que me contarías cuando alguien por fin se hiciera dueño de tu corazón, Jane. —dijo con un tono de reproche, sin quitarle la mirada de encima al chico rubio.

—Lo siento, es que ha pasado todo tan rápido que no tuve tiempo de llamarte para contarte —sonrió—. Además que no sabía que venías a la ciudad. Tú tampoco me lo contaste —contraatacó cruzándose de brazos—. Así que estamos a mano.

—No voy a decir nada sobre lo que vi porque te quiero —le mostró una sonrisa—. Pero, quiero una explicación luego.

—Está bien, gracias. ¡Ay qué gusto verte, Niall! —lo abrazó muy fuerte—. Te extrañé demasiado.

—Yo también —le correspondió el abrazo—. No sabes cuánto. Si me permites, debo ir a saludar a tu familia. Cuídate —se despidió de ella con un beso en la frente—. Y tú —miró al chico quien estaba con una mueca burlona mirándolo—. No quiero saber que le hiciste daño.

—Te aseguro que no le haré daño. —tomó de nuevo a Jane pero esta vez de las caderas, jalándola hacia él para remarcar su territorio.

—Nos vemos, Jane. —se alejó de ambos caminando dentro del festival.

—Ay, ya se le pasará, hablaré con él. —Jane se volvió hacia el rubio—. Ya que estás aquí, vamos adentro. Me inscribiré para ser candidata a Reina del Festival.

—¡Vaya! Estoy ansioso de que ganes, mi reina.

Jane y el falso Kendall se fueron caminando hacia el festival, mientras ambos eran vigilados por la mirada azulada del mejor amigo de la chica. Niall había preparado una sorpresa para ella, por esa razón había ido al festival, para sorprenderla y ver cuánto había cambiado desde que se fue hace 5 años de la ciudad en busca de mejores condiciones de vida. ¿Ahora resultaba que alguien más se estaba robando la atención de ella? No lo podía creer. Era insólito. Habían sido amigos desde hace mucho tiempo, prácticamente desde que Jane se mudó a la ciudad. Niall había sido esa mano que ayudó a Jane en todo momento, se habían convertido en los mejores amigos inseparables, y por ende, con el pasar de los años, el chico terminó enamorándose de su mejor amiga. Nunca se lo había contado por miedo al rechazo, pero ahora que había vuelto, y era alguien nuevo, se había prometido que iba a ser valiente y le contaría que estaba enamorado de ella. Pero, las cosas no siempre son como se esperan.

Los Gemelos | Kendall Schmidt. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora