Me enfermas (Aomine x lectora) (Completa)

Discordia.

¿Por qué no estaba feliz?

Apartaste tu mirada y volviste a posicionar los ojos sobre Wakamatsu, quien aun era zarandeado por sus compañeros. 

Reíste tímidamente.

-¡Ya está bien!, ¡Váyanse de aquí!- Los echó él, muy avergonzado. 

Todos volvieron a su lugar, pero continuaron observando. 

-Y bueno... ¿A donde vamos a ir?- Preguntaste, notando que a él le costaba muchísimo expresarse.

-Ah, eh...- Miró hacia el techo.- No lo sé... ¡pero eso no importa!- Empezó a negar con sus manos exageradamente.- ¡Podemos ir al lugar que tu quieras (T/A)-san, lo decidiremos una vez que estemos allí!, ¿Te parece?- 

-Oh, si...- Asentiste amablemente.-  ¿A que hora quieres que quedemos?- Pensaste que eras cruel por hacerle tantas preguntas, pero realmente necesitabas saber. 

-¿¡T-te parece a las 6pm en la estación del metro?!- Su voz sonó más ruidosa de lo debido, y reíste para tus adentros. 

-Está bien, trataré de ser puntual.- Sonreíste, provocando un nuevo sonrojo en el chico. 

-Bueno, bueno...- Apartó sus ojos de ti.- E-entonces... ¡nos vemos mañana!- Dijo, y luego de despedirse vagamente con la mano, salió corriendo lo más rápido que pudo. Pudiste ver que volvió a ser abordado por esos chicos, que parecían estar haciéndole preguntas. 

A decir verdad, no te esperabas eso, y tampoco sabías por qué habías dicho que si. Wakamatsu te agradaba, y solías hablar con él algunas veces, pero nunca pensaste que él... podría tener algún tipo de sentimiento por ti.

No pensabas que nadie pudiera tenerlo. 

Tal vez, las personas pudiesen pensar que el muchacho te estaba invitando a salir como un amigo, y que tu estabas malinterpretando sus acciones, pero no eras estúpida. La manera en la que había actuado ahora te lo dejó bastante claro. 

Ahora que empezabas a recordar, últimamente habías descubierto al rubio mirándote y luego desviando la vista, pero no le prestaste atención porque tu cabeza estaba en otro lado... Aomine. 

Mientras estabas allí parada, escuchaste que unos pasos se acercaban a ti. Volteaste para encontrarte con tu amiga, Momoi, cuya expresión no había cambiado, de hecho podrías decir  que se veía... molesta. 

Alzaste una ceja, expresando tu confusión.

-(T/N)-chan...- Te llamó, con un tono de voz que ella no había usado en ti.

-¿Uhm?...-

-¿A caso Wakamatsu-san te invitó a salir?- Te pregunto, acercando su rostro al tuyo. 

Te sentiste intimidada. Parecía como si intentara analizar cada reacción tuya.

-Ah... pues si... ¿Por qué?- Contestaste torpemente.

-Y tú le has dicho que si.- Habló al instante, de manera un tanto agresiva.

Frunciste el ceño. Aquella manera suya de hablarte... no te agradaba nada..-

-Si, Satsuki.- Tu voz sonó seca y dura. 

Ella arqueó las cejas. Lució como si se sorprendiera. Te tomó del brazo en una fracción de segundo, y te sacó del gimnasio.

-¿Qué sucede?- Preguntaste, poco amigable, soltándote de su agarre al instante en que salieron por la puerta.

Las facciones de la chica se entristecieron, pero su rostro volvió a su expresión de regaño inmediatamente.