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Archie después de que rompes con él.
Archibald Andrews no era conocido por tener novias formales, más bien, todo lo contrario. Es por eso mismo que, cuando él comienza a salir con Lily, nadie podía creerlo del todo.
La pareja de adolescentes, la cual todos creían que acabarían engañándose el uno al otro en cuestión de un par de días, avanzaron en contra de las creencias populares y duraron todo el año escolar.
Archie planeaba una noche especial para celebrar su aniversario de un año, después de todo, era la primera vez que ambos cumplían una relación tan larga y el pelirrojo no podía estar más que feliz con tenerla como suya.
Pero, una semana antes de tal celebración, Lily se acercó y rompió el corazón de Archie en cientos de pedazos.
—Lo siento, Archie. Te amo, mucho, pero justo ahora no puedo estar contigo. Y es porque te amo que te dejo—, hablaba la morena con la mirada empañada por las lágrimas mientras observaba el rostro de la persona que más amaba en el mundo caer y deformarse.
Archie intentó tomar las manos de la chica, pero Lily dio un paso atrás, provocando que el pelirrojo le mirara un momento a sus manos separadas antes de volver a mirarla a los ojos —. ¿Por qué?—, fue la única pregunta que formuló, su voz sonando tan roto como sus ojos demostraban estarlo.
—Realmente lo siento, Archiekins—, repitió una vez más Lily, sorbiendo por la nariz mientras intentaba no romper en llanto —. Espero que nunca cambies.
Y, sin más, la morena le dio la espalda y se alejó de él.
Después de eso, Archie se refugió en su música y en los entrenamientos. Tal vez no era lo mejor pero, por ahora, él sólo se sentía mejor cuando dejaba salir su rabia contra la bolsa de boxeo y al desnudar su alma con la guitarra.
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