Capítulo 30

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Yo me fui acercando a su hombro poco a poco hasta apoyarme en él. Cuando me apoyé el dio un respingo y luego se tensó pero enseguida se relajó. Yo sonreí. No sé cuanto tiempo estuvímos así pero para mí fueron unos minutos muy especiales. Levanté la cabeza y le miré a los ojos. Él me mantuvo la mirada pero enseguida la apartó, yo me reí.

- ¿Nos vamos?, tu madre estará apunto de llegar.

- Vale, pero mi madre no llegará hasta la madrugada...

- ¡Anda tira!

- Jajaja

Le saqué la lengua y nos fuimos a su casa entre bromas, gritos y risas.

- Bueno... ya hemos llegado...

- Ya... - le respondí.

- Raquel, ¿quieres pasar?

- Vale - dije con una gran sonrisa.

Llamé a mis padres para decirles que cenaba en casa de Pablo, por suerte me dejaron, ya que Pablo les cae genial y se llevan muy  bien con sus padres. También les advertí de que me iba a quedar a dormir, me dejaron porque saben que tenemos una gran amistad, si fuera una relación no me dejarían quedarme en su casa a dormir estandos solos.

- ¿Qué quires cenar? - me preguntó.

- ¿Qué tal se te da improvisar? - le respondí con una sonrisa pícara que él me devolvió.

The Story of my Life [INTERRUMPIDA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora