La invisible del violín

Capítulo 17 | Distancia

¿Qué sucedió?

Es la pregunta que me hago cada día desde que Dave Simpson y yo terminamos nuestra relación.

Todo cambió aquella tarde en la secundaria, estábamos frente a frente y nos dimos cuenta que ambos nos habíamos convertido en clichés; yo en una porrista, él en un Tigre de Loto.

Se decepcionó de mí tanto como yo de él, ese día las explicaciones no importaron, simplemente perdimos lo más preciado que teníamos, nuestra invisibilidad.

Ha pasado un mes desde entonces y he sobrevivido, trato de no pensar en Dave pues siempre que lo hago me deprimo.

Ocupo mi mente en otras cosas, por ejemplo las entretenidas coreografías que practico con las demás porristas, también me dedico mis estudios y a compartir momentos agradables con mi novio, Evan Holt.

Sí, volví con el capitán cliché, me di cuenta que Evan nunca dejó de amarme, de hecho me volví más cercana a él desde que me alejé de Dave.

Cada mañana Evan llega a mi casa, subo a su auto y nos vamos a la secundaria; en clase seguimos juntos, después veo sus entrenamientos y agito mis pompones para apoyarlo. Las tareas también son algo que nos mantiene unidos.

Pensé que la ruptura con Dave me afectaría, no fue así, algunas veces la tristeza toca a la puerta, no voy a negarlo, pero la mayor parte del tiempo me mantengo tranquila y sé que fue lo mejor, además él también es feliz pues retomó su relación con Sharon.

Dave y yo no congeniábamos tanto, aparte ya no teníamos mucho tiempo para estar juntos, nuestro lugar invisible quedó en el olvido y los viajes en el autobús fueron disminuyendo poco a poco.

De vez en cuando conversamos a través de nuestra pared, sin embargo ya no es lo mismo, sólo hablamos tonterías y en ocasiones me ha dejado hablando sola, siempre está agotado por los entrenamientos del equipo.

Nos hemos distanciado y cada uno ha seguido con su vida…

4:00 a.m.
Toco el violín pero él ya no me responde, dibujo margaritas pero ya no se las entrego.

5:00 a.m.
Plancho mi cabello, me maquillo y me pongo mi uniforme de porrista, pero de Dave Simpson no recibo cumplido alguno.

6:15 a.m.
Escucho a Ty-Sky mientras bebo café del termo; eso nunca cambiará.

6:30 a.m.
Evan ha llegado por mí, subo a su auto y ambos sabemos que un típico embotellamiento en Ciudad Loto nos hará llegar tarde.

7:27 a.m.
Sharon y Dave están recostados sobre la pared al lado del salón, no dejan de besarse.

10:22 a.m.
El recreo ha llegado, veo a Joey y Felix tomados de la mano; él lleva una falda genial y Joey no deja de sonreír, se ven tan felices juntos.

11:55 a.m.
Mientras almuerzo con Sharon y las porristas, Evan se ha acercado a mí y me besa con intensidad.

5:00 p.m.
La última clase ha terminado, de inmediato me voy con Sharon al campo de fútbol para apoyar a los Tigres.

5:15 p.m.
Agito mis pompones y grito el nombre de mi capitán cliché; por alguna razón Dave me ha hecho mala cara.

7:00 p.m.
Mi sopa de tomate se enfría mientras intercambio mensajes de Whatsapp con Evan; mamá me ha dicho que ponga el teléfono sobre la mesa y cene en paz.

8:50 p.m.
Estudio lo visto en clase pero el sueño me invade, entonces decido recostarme sobre la cama y me pongo los audífonos, escucharé a Tyler Skies.

9:03 p.m.
“Hard days” esa canción siempre me pone sensible.

9:12 p.m.
“My perfect dream” ha logrado sacarme las lágrimas...

9:15 p.m.
A quién engaño... Dave, estoy pensando en ti.

9:20 p.m.
Tantas lágrimas sobre mi almohada, tanta distancia entre nosotros.