Catching Feelings - Justin Bieber y Tu - 2°da Temporada de Fall [TERMINADA]

Capitulo 23: ~Buenas noches~

Maratón 3/?

Después de un rato el detuvo la moto luego se bajó y yo me quedé mirándolo.
- ¿A dónde vas? – pregunté y el sonrió estirándome su mano para que la tomara.
- Quiero un helado ¿Y tú? – dijo y yo reí.
- Claro. – dije tomando su mano.
Entramos a la heladería y fuimos a pedir.
- Buenas tardes ¿Qué desean? – dijo la chica sonriendo coqueta.
- Eh, por favor un cono de chocolate y uno de fresa. – le dijo Justin a la chica escogiendo por mí, claro porque sabía cuál era mi favorito. Miré a la chica y sentí enojo: no dejaba de mirar a Justin con esa estúpida sonrisita, y lo peor de todo es que el también le sonreía.
- En un momento. – le dijo ella a él ignorándome completamente a mí. Ella se fue y mireé a Justin con enojo.
- ¿Qué? – dijo, miró hacia donde se fue la chica y luego a mi – ¿Estas celosa? –preguntó levantando una ceja.
- ¡Pff! Claro que no. – dije encogiéndome de hombros y el rió. A los pocos minutos llegó la chica con los helados, centrando su atención en Justin, haciéndole ojitos y sonriéndole coqueta haciéndome hervir de rabia.
- Aquí están. – dijo ella entregándoselos, el tomó primero el mío y se volvió a mí.
- Toma, preciosa. – me dijo entregándomelos con ternura.

 Yo no pude evitar sonreír, miré a la chica y me miraba con celos. Justin tomó su helado ignorando completamente a la chica, pagó y luego tomó mi mano llevándome hacia la salida.
 Volteé a mirar a la chica y me comía con la mirada así que sonreí en señal de victoria y le saqué la lengua. Si, muy madura. Pensé.

 El entrelazó nuestros dedos mientras caminábamos en el parque. Empezamos hablar un poco sobre cosas sin sentido, luego hablamos del pasado recordando viejos tiempos.
 Me preguntó sobre mi trabajo y yo con una sonrisa le conté todo, en ese momento Justin era el hombre que toda mujer quería tener: Uno que te escucha.
- Oye… ¿Qué harás el sábado en la noche? – me preguntó y yo lo miré.
- Mmm nada ¿Por qué? – dije.
- Bueno, pues me enteré por ahí que mañana firmaras contrato y ya podrás tener tu propia marca. – yo sonreí de oreja en oreja – Así… Que hay que celebrar. – me sonrió y yo reí.
- ¿Qué? ¿Acaso qué tienes en mente?.
- Bueno una cena el sábado en la noche en casa de mis padres donde estaremos todos reunidos para celebrar tu logro y el de Caitlin. – dijo.
- ¿Hablas enserio?... ¿Una cena? – pregunté.
- Si. Tenemos que celebrar este maravilloso logro tuyo se lo mucho que has trabajado para lograrlo – dijo y yo me enternecí.
- Así que una cena, eh. – el asintió – ¿Y cómo me tengo que vestir?
- Algo formal… Puedes ponerte ese vestido que tanto me encanta que te pongas.- dijo
- Justin; no me puedo poner un disfraz de enfermera sexy para cenar con tus padres. – dije riendo y el soltó la carcajada.
- No, ese no. – dijo riendo.
- ¿Entonces cuál?- pregunté.
- Ese negro que tanto me encanta – dijo.
- Ahh ¿El que usé aquella ves que fuimos a cenar?- el asintió – Puede ser. – dije, el se detuvo y miro asía arriba – ¿Qué pasa? – pregunté.
- Va a llover – dijo sonriendo.
- ¿Qué? Claro que… - no pude terminar la frase por que las gotas empezaron a caer sobre mí.
- ¡Corre! – gritó Justin mientras reía. Corrí detrás de el tratando de buscar un refugio para no mojarme mientras que a el no parecía molestarle porque reía y brincaba sobre los charcos como un niño.
- ¡Justin pareces un niñito! – dije riendo.
- ¡Ven, no seas aguafiestas! – dijo abriendo los brazos en el aire dejando que el agua callera sobre él.

 Yo reí y lo imité empezamos a correr por todo el parque brincando sobre los charcos y riendo, estábamos completamente empapados de agua pero lo disfrutábamos. El tomó mi mano y me llevo hacia la calle.
- Esto merece un baile. – dijo y yo reí – ¿Me permite mi bella dama? – dijo haciendo una reberencia.
- Claro caballero. – dije tomando su mano y empezamos a bailar bajo la lluvia en medio de la calle riendo sin parar hasta que el me alzó dándome vueltas en el aire mientras yo abría mis brazos riendo de felicidad.
 Hace mucho que no me reía así y disfrutaba tanto algo como esto. El siempre encontraba la manera de hacerme feliz, divertirnos como niños pequeños bajo la lluvia solo se le ocurría a Justin. Se escuchó un trueno y Justin me miró.
- Oh, oh, creo que va llover mas fuerte – dijo y yo sonreí – El ultimo que llegue a donde dejamos la moto tiene penitencia. – dijo empezando a correr yo solté una carcajada corriendo detrás de él.
- ¡Espera, no se vale! Tu corres más rápido – me quejé. Él se dió la vuelta.
- Rápido, súbete a mi espalda. – dijo sonriendo.
- Okay. – dije y pegué un brinco subiéndome a su espalda. El empezó a correr conmigo así, y yo no podía parar de reír… Se había vuelto loco.


Entramos al departamento riendo a carcajadas porque estábamos completamente empapados de agua. Parecía que nos hubieran tirado a una piscina con todo y ropa.
- Creo que no hay luz. – dijo Justin encendiendo el interruptor.