Al terminar la barbacoa fui tras Jungkook.
- ¡Jungkook espera!- exclamé a sus espaldas.- ¿Hoy también vas a salir a correr?
- Em.. sí ¿por qué?- respondió abriendo los ojos.- ¿Quieres venir?
- La verdad es que sí, debo empezar a cuidar mi salud.- desvié la mirada al suelo.- ¿Puedo ir?
- ¡Claro! Es genial que decidas esto, es importante para un idol tener una buena salud.- dijo entusiasmado.- Te espero en la puerta en 15 minutos.- se dio la vuelta y entró en su cuarto.
Yo me dirigí a mi dormitorio para coger ropa limpia y luego ir al baño a darme una ducha rápida. Estuve lista 5 minutos antes, sin embargo, Jungkook ya se encontraba esperando recargado en la pared.
- ¿Te hice esperar mucho?- pregunté apurada.
- Que va.- se interrumpió a si mismo.- Nuestra nueva compañera ha llegado antes, debería daros vergüenza.- dijo con una sonrisa mirando detrás de mi.
- Es culpa de Jimin, tuve que ir a buscarlo porque se quedo dormido.- se quejo Jin haciendo un puchero.
Jimin bostezó mientras ambos llegaban hasta la puerta.
- Ya te dije que lo sentía.- replicó con un resopló.- ¿Cómo qué vienes con nosotros Ashly?- preguntó concentrando toda su atención en mi persona.
- Debo comenzar a cuidar mi salud y aspecto.- contesté con seguridad.- Es importante para un idol prestar atención a esas cosas por sus fans.
- Oh, haces bien.- agregó Jin.- Bueno ¿nos ponemos en marcha?
Tras esas palabras Jungkook abrió la puerta y salimos al exterior, una ráfaga de aire helada me hizo tener un escalofrío.
- Toma.- dijo Jimin quitándose su sudadera dejando a la vista sus marcados músculos.- Nadie quiere que la pequeña Asly se resfríe.- añadió con una sonrisa mientras me la ponía alrededor de los hombros.
- P-Pero tú también te resfriarás si no estás bien abrigado.- hice el amago de devolvérsela, pero me sostuvo por ambas muñecas.
- Prefiero ser yo quien se enfermé a que lo hagas tú.- aún mantenía su sonrisa.- Si me entra frío te la pido ¿de acuerdo?
- Vale...- accedí medio convencida.
Al sentir una mirada fija en mi me volteé para encontrarme con la fría mirada de Jin quien estaba calentando en compañía de Jungkook, que también nos miraba de reojo.
- ¿Podemos ponernos en marcha de una vez?- se quejó Jungkook mientras empezaba a correr.
Durante 1 hora estuvimos corriendo sin detenernos, cosa que me dejo sin aire por lo que tuve que sentarme en un banco que había donde nos encontrábamos.
- ¿Estás bien?- preguntó Jungkook sentándose a mi lado.
- Si, si... solo necesito un momento.- apoyé mi espalda contra el respaldo del banco.- Podéis seguir sin mi.
- ¿Eres idiota?- Jin se había algo enfadado.- No podemos dejar a una chica sola a las tres de la mañana.- se cruzó de brazos.- Si tan solo hubieras dicho de parar antes no nos habríamos molestado.
- Lo siento... Sabía que os retrasaría si venía, pero quería que se notará lo menos posible.- me llevé la mano al pecho.- Ya podemos ponernos en marcha nuevamente.- unos brazos me agarraron de los hombros antes de poder levantarme.
- No,aún te encuentras mal. Debes descansar.- dijo Jimin a la vez que comenzaba a darme un masaje en los hombros.- No tenemos prisa Ashly.
- Después de todo lo que queremos es animarte a hacer deporte, no quitarte las ganas.- añadió Jungkook agarrando mi mano para acariciarla.- Sera mejor que volvamos.
Los chicos se dieron cuenta de que me había dormido cuando deje de responder, esta vez, Jin se encargó de llevarme "a caballito" de vuelta a casa. Aún que fuera inconscientemente, me habían animado más de lo que pensaban.
Cuando volví a despertar los chicos se habían ido, me sentí mal al no haberme podido despedir de ellos, aún que sabía que los volvería a ver pronto los extrañaría.
- Vamos anímate.- dijo Aisha cogiendo mis mejillas para forzar una sonrisa.- Así mejor ¿verdad Nora?
Nora se limitó a suspirar y salir del dormitorio.
- Sé que tu sonrisa la enamoro.- vaciló Aisha.- ¿Qué te pasa?
- Voy a extrañar mucho a los chicos y cuando vuelva Nora se quedará aquí.- murmuré.- Además el jefe me llamo ayer y se le notaba enfadado.
- ¿Qué te dijo?- preguntó Nora volviendo a entrar con un café en la mano.
- Que debería centrarme en mis canciones solistas y dejar de hacer colaboraciones. Que estaba muy bien, pero que ese no era el contrato que yo había firmado.- di un último suspiro antes de meter la última prenda de ropa en la maleta.
- Entiendo...- respondió Nora.- Pues deberías hacer lo que te pide y punto. Cuando te quedes con Taeyang y G-Dragon vas a tener tiempo libre, puedes aprovechar para escribir canciones y luego enseñarlas.- dio un sorbo a su café.- Ya que estarás aquí podrías hacer una última canción conmigo. Ya la he escrito y coreografiado, solo debes aprenderte tus partes.
Mi boca se abrió de par en par, mientras yo había vagueado Nora trabajaba duro.
- E-Esta bien, te haré caso. ¡Haré unas magníficas canciones que le llegaran al corazón al jefe!- exclamé decidida.
En ese momento, sonó un claxon desde el exterior. Nos levantamos las tres a la vez y salimos.
Al verme, Taeyang se dirigió a mi y cogió mis pertenencias, gesto que me hizo poner mis brazos tras mi espalda. Me encontraba terriblemente avergonzada por la situación. (imagen de la multimedia)
- Buenos días Ash.- me saludó Taeyang con una amplia y radiante sonrisa.- ¿Qué tal te encuentras?
- Buenos diás Tae. Estoy bien, gracias- no podía subir mi mirada más allá de su sonrisa, noté que mis mejillas ardían.
- Me alegro mucho.- y sin más que añadir me dio la espalda para colocar mis pertenencias en el maletero y subir al asiento del copiloto.
No sabía que me había pasado, pero si no llega a ser por la mano que me puso Nora en el hombro aún podría haber estado allí petrificada.
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Aquellos 7
FanfictionPonte en la piel de una chica que acaba de perder su sueño que era su trabajo por su extrema timidez y su novio por las fanáticas que la amenazaban. Necesitarías ayuda para no caer en la desesperación ¿cierto? Pues esto es lo que le paso a nuestra...