Aquellos 7

¿¡Volvemos a ser novios!?

Tras terminar el picnic, Taeyang me ayudó a levantarme y entre todos recogimos lo que habíamos almorzado. Cuando estábamos volviendo al coche recibí un mensaje de Whatsapp.

Era un audio de Rap Monster.

- "Nena, estoy reunidos con el resto -gritaron durante unos segundos para demostrar que estaban todos presentes- Hablo en nombre de todos para decir que te extrañamos y que esperamos que te este yendo bien"

-Jimin lo interrumpió- ¡Ashly! Dentro de 15 minutos tenemos que hacer un programa de Weekly Idol para promocionar de nuestro regreso con la versión japonesa de Blood Sweat & Tears"

-Rap Monster carraspeo volviendo reclamando atención- Esperamos que lo veas, sin más nos despedimos. 1, 2 -todos se despidieron a la vez"-

El audio acabó justo cuando G-Dragon puso en marcha el coche y Aisha, quien estaba sentada a mi lado comenzó a reír.

- ¿Qué hay con esa despedida?- preguntó aguantando su estómago.

Me limité a sacarle la lengua mientras les respondía un breve "okey" a los chicos y guardaba el móvil en el bolsillo.

Taeyang puso una cadena donde sonaban grandes éxitos de la primera generación del k-pop y he de admitir que una de ellas me inspiro para escribir mi canción debut, que según el jefe sería al llegar a Corea.

Cuando G-Dragon estacionó el coche en el garaje salí disparada hasta la habitación, me sentía llena de creatividad y quería plasmar mis ideas. Al entrar, cogí papel y bolígrafo y mis manos hicieron el resto del trabajo.

Tanto individuales como cooperativas, todo tipo de canciones surgían en mi mente por lo que me lleve horas escribiendo, olvidando completamente la aparición de los chicos.

Como aún tenía tiempo antes de bajar a cenar decidí darme una ducha mientras escuchaba la entrevista en el móvil, el agua caliente consiguió quitarme el cansancio.

Al cabo de unos 20 minutos la entrevista acabó, por lo que salí envuelta en una toalla. Me encontré con Taeyang que estaba sentado en mi cama.

- ¿Qué haces aquí?- pregunté cruzándome de brazos.

Él me miro de arriba abajo antes de apartar la mirada.

- ¿Qu- me interrumpí al ver que estaba en toalla.- ¡No me mires!- grité corriendo de vuelta al baño.

- Te he visto con menos ropa, pero te respetaré.- contestó entre risas

- ¡Cállate tonto!- repliqué sintiendo mis mejillas arder, pero una sonrisa tonta se apodero de mi rostro.

Volví a salir cuando ya me había puesto mi ropa de siempre, nos mantuvimos en silencio hasta llegar al ascensor que decidí hablar.

- No le digas a nadie lo que acaba de pasar.- pedí sin poder mirarle a la cara.

Taeyang se limitó a asentir mientras se mordía el labio inferior, entramos en el comedor buscando a Aisha y G-Dragon entre todos las personas.

- ¡Estamos aquí!- exclamó Aisha llamando nuestra atención.- ¿Por qué habéis tardado tanto?- preguntó cuando nos sentamos.

- Estaba oyendo una entrevista de los chicos.- respondí sin querer darle mayor importancia.

- Esos chicos... ¿se portan bien contigo?- preguntó G-Dragon para mi sorpresa.

- P-Pues sí, son muy majos, saben como animarme cuando estoy triste y sus canciones me motivan para alcanzar sus pasos y ser igual de buena que ellos.- contesté con una amplia sonrisa.