Presencia

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-¡Ciel está embarazado! Grito Ian cerrando fuertemente los ojos, sabía que el conde no le quería decir a su pareja aun, pues tenía miedo....

Todos callados, solo el silencio reinaba en la habitación, por su parte Sebastian detuvo su caminar y solo observada a Ciel con los ojos abiertos como platos, Undertaker dejó caer su death scythe, y Ciel simplemente cayó sobre sus rodillas.

Pensamiento Ciel:

Aquel supuesto chico había dicho lo que yo no quería que se supiera, no podía pasar esto.... no aún no.... volteó a ver a Sebastian, y solo me observar.... de seguro me odia,.... de seguro dirá que soy un estúpido sí creo que lo aceptara.... ¿se ira?, no me dejes..... ¿Me odias?, no lo sé.... tengo miedo, miedo de que esto sea demasiado y simplemente se vaya....

Pensamientos Sebastian:

Ciel... esta... embarazado....

¿Cómo es posible esto?, yo solo soy un ser que trae destrucción y desgracia.... hasta que el apareció prometí que solo lo amaría a él pero......

Fin de los pensamientos:

Ciel miro a Sebastian, y este desvío la mirada, miro con sus ojos como el demonio miraba al piso, eso le partió el corazón ¿se había rendido?, ¿seguiría luchando?, ¿se iría?.... la mente y corazón del conde parecían romperse en miles de pedazos, sin poder evitarlo, comenzó a llorar, lágrimas y sollozos de dolor se escuchaban por parte del conde.

Ian se arrepintió de lo que dijo y como señal de ello, trató de levantarse y caminar hacia él, "detente", escucho decir a la voz de una dama en su cabeza.... "sigue mirando, y verás si su amor es verdadero o falso"..... Y así lo hizo, siguió observando

Undertaker miro al conde con lástima - Se lo dije.... tarde o temprano algo saldrá mal...Susurraba mientras se acercaba al demonio - Por eso, tenemos que acabar con su dolor

Sebastian tenia miles de pensamientos en su cabeza, para él su tiempo se había detenido, pero era diferente para los demás, sin saberlo el peligris estaba a punto de atravesar el corazón de él.

- ¡Detente! Gritaba el conde parándose y corriendo hacia ellos, podía haber la probabilidad de que su demonio lo dejara, eso le partía el corazón, pero lo amaba demasiado que prefería ver eso a verlo morir...

El peligris hizo caso omiso al conde, el pelinegro por su parte salió de sus pensamientos y al ver las intenciones de Under dio un salto hacia atrás, logrando ver así el rostro de su amado... tenía los ojos hinchados y rojos, señal de qué había llorado, ¿por su culpa?, si... así era, y él se dio cuenta de esto, causando que cayera al piso por no prestar atención.

Under por su parte aprovecharía el descuido del demonio y como golpe final le enterraría su death scythe....

- ¡No! Se escuchaban los gritar de Ian y del conde.

No fue hasta que Under salió volando y se pegó contra una pared qué se dieron cuenta de que Sebastian estaba bien, y que en frente de este había una dama, con la mano llena de sangre, ella había hecho que el peligris saliera volando y lo más importante había salvado al demonio.

- Ustedes dos Hablaba la dama a Sebastian y a Ciel - No es momento de bajar la guardia Miro a Sebastian con molestia - Si lo amas no es momento para dudar....

Ciel impactado abrió los ojos como platos, ¿podría ser ella?, no lo podía creer, ¿cómo era posible?

- A.. buela Susurró Ciel acercándose a la dama, la cual asistió con la cabeza y le sonrío.

- ¿Abuela? Preguntaba el pelinegro mientras se ponía de pie

- Así es Decía la dama mientras ayudaba al castaño a levantarse - Soy su abuela Claudia Phantomhive

Ian le sonrío a la abuela de Ciel - Que bueno que llegaste

- Si, pero aquí lo más importante es, ¿qué te pasa? Claudia miro a Sebastian con el ceño fruncido - ¿No te da gusto la noticia?, no ves que hieres a Ciel demonio estúpido Hablaba pero fue callada por su nieto

- Abuela, no es nada.... solo... no es nada Decía con la mirada fija en el piso, sentía qué las lágrimas le volverían a salir, lo que ahora menos quería, pero no pudo evitarlo, frágiles y delgadas gotas de agua recorrían sus mejillas y caían al piso, de esto se dieron cuenta todos y solo guardaron silencio, a excepción de cierto pelinegro

- Ciel Susurraba el demonio mientras tomaba el rostro de su amado, y hacia que lo mirara mientras secaba sus lágrimas - ¿Qué pasa? Preguntaba con tono dulce

- Tu... tú te iras... yo lo se Respondía el peli azul dejando salir más lágrimas - Porque tu.... tu negaras a este bebe Terminaba por decir mientras acariciaba su vientre

- Eres un bobo por creer que por esta noticia te abandonaría Sebastian sonrío y le dio un beso en la frente a su amado - Yo te diré la verdad no entiendo cómo es que estás embarazado, pero de algo estoy seguro, y es de que te amo y amo a esté bebe.... por eso deja que me quede con ustedes

El peli azul dejo de llorar y solo abrazo a su acompañante - Por supuesto Ambos se miraron y sonrieron entre sí, aquellos miedos que tenía el conde habían desaparecido con tan solo unas palabras, Ian y Claudia también sonrieron, pero después Claudia hablo

- Ciel mi niño, por favor vayan sé, yo detendré a Undertaker Decía acariciando la mejilla de su nieto el cual se sorprendió

- Pero abuela.... Decía el joven mientras veía a Under, el cual parecía estar inconsciente

- Estaré bien, solo quiero hablar con él, pero te prometo que los veré en la mansión, dentro de poco Claudia sonrío

- Está bien Accedió el conde, pues a pesar de todo Ian parecía estar muy mal, y Sebastian estaba ya cansado

- Bueno, tu Claudia miro a Sebastian - Cuídalos por mi

- Claro Contestaba el pelinegro sonriendo, cargando a Ian en un brazo el cuál parecía estar preocupado, y Ciel en otro

- Tranquila, los veré pronto Decía nuevamente la abuela de Ciel al ver como el castaño dudaba en irse

- Pero,.... Contestaba el supuesto chico

- Solo ve, tus heridas son graves y tienes que descansar Claudia sonrío, - Además tienes que protegerlos y explicarles todo Término por decir sabiendo que tanto Ciel como Sebastian tenían muchas preguntas por hacer pero no las harían por la situación en la que se encontraban

- Entiendo El castaño accedió y así los tres se fueron, dos alegres pero igual de preocupados y confundidos como el otro, mientras Claudia y Undertaker se quedaron solos, había qué aclarar y arreglar algunas cosas.

Chan, chan, chan...

Comentarios y dudas con gusto los respondo.

Nos vemos y gracias por leer.

El destino nos enlaza al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora