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Caminé hacia la entrada principal de la escuela, cuando de repente vi a Eren con algo blanco entre los dedos.

—¿Ahora resulta que fumas? —pregunté, algo desconcertada para ser honesta.

Me miró con sorpresa.

—N-No es mío... Reiner me pidió que se lo tuviera mientras iba a hablar con Annie.

—¿Desde cuándo eres amigo de Reiner? —pregunté.

Levantó los hombros.

—Supongo que desde me volví delantero del equipo de fútbol. Es el capitán, no puedo negarle un favor.

Me reí.

—¿Cuánto tiempo llevas ahí esperándolo?

—Como... ¿diez minutos?

—No seas tonto. Bota eso y ya vámonos a clase —dije agarrando el artefacto y tirándolo al piso antes de pisarlo, volverlo a recoger y tirarlo a la basura más cercana.

Sonrió e hicimos nuestro camino hacia el aula.

Se me había pasado por completo que las cosas debían ser diferentes por el hecho de que nos habíamos besado; pero al ver a Eren actuar como siempre, opté por seguirle la corriente. Supongo que la normalidad y confianza en nuestra relación es tal, que sencillamente habíamos acordado no volver nada raro... en absoluto silencio.

Noté como mucha gente me estaba mirando, pero no era normal. Se quedaban callados si estaban en una conversación, y no cedían su mirada ni un segundo.

—Qué extraño —comentó Eren—. Todos te están mirando como raro, ¿no?

Apreté mi mochila.

—Es verdad... ¿qué demonios?

Llegamos finalmente al aula, pero no fue mejor. Al poner pie después de la puerta, pasó lo mismo: todo el mundo levantó la cabeza y dejaron de hablar.

Eren miró al rededor, ya irritado.

—¿Se les perdió algo? —exclamó él con molestia.

Todos volvieron a hablar y bajaron sus miradas nuevamente.

—¿Qué demonios está pasando? —preguntó mientras se sentaba.

—Eso mismo quisiera saber yo... —comenté en lo que hacía lo mismo que mi amigo.

El timbré sonó y el Maestro Ackerman entró.

—Buenos días a todos.

—Buenos días —respondimos.

En ese momento él me dedicó una mirada como: "Tenemos que hablar con urgencia", a lo que asentí, entendiendo el mensaje.

La clase siguió como de costumbre. Llamaron a lista, nos explicaron de los eventos que iban a tomar lugar en el día y finalmente un anuncio.

—Bueno, el comité del consejo estudiantil finalmente ha decidido nombrar al representante de esta aula —pausó el docente—. Emilia Rangel, has sido elegida como la representante del aula 3-C.

—¿Eh? —fue lo único que pude murmurar antes de escuchar los aplausos de mis compañeros.

—¡Sabía que lo lograrías! —exclamó Eren con una sonrisa.

Le halé el brazo.

—Yo no envié mi solicitud para el consejo estudiantil —susurré entrando en absoluto pánico.

—No —dijo sin parar de aplaudir—, yo lo hice.

Abrí los ojos como platos, a punto de reclamarle algo, cuando Levi nos interrumpió.

EXAMEN ✎ levi / eren y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora