Mi otra vida|(Camren)

Capitulo 27:"Maldad"

El cuerpo de Lauren daba pequeños saltos cuando sentía un escalofrío, estaba empapada de sudor y abría y cerraba sus ojos lentamente. La herida estaba sangrando demasiado, sentía que iba a morir.

-Lauren, quédate conmigo por favor- pedía Camila sentada en la cama al lado de ella. Lauren la miro de reojo y se quejó de dolor.

-Vo...Voy a morir- dijo Lauren. Todo a su alrededor daba vueltas.

-No digas eso Lauren, Keith ya estaba buscando ayuda- dijo Camila acariciando suavemente su mano.

-Camila, si tú... si tal vez tú y yo...- Lauren trago ya que su garganta se estaba secando.

-No hables por favor, guarda la poca energía que te queda- dijo Camila recostándose al lado de Lauren.

-Si tú me hubieses conocido antes...- Lauren se detuvo y tosió- Tal vez... yo te hubieses gustado... me... me... me hubieses querido- dijo con los ojos cerrados.

Camila la vio y sintió que su corazón dio un brinco. ¿Como no querer a esa mujer?

-Me gustas así, y te quiero así Lauren- dijo Camila acercándose a ella.

Lauren abrió los ojos para verla y sintió los dulces labios de Camila sobre ella en un tierno y delicado beso.

-Gracias Camz- dijo Lauren temblando.

Camila la miraba y veía que cada vez se ponía peor, Lauren temblaba, sudaba exageradamente y parecía que estaba delirando.

-Es aquí Doctor, rápido por favor- dijo una voz en la puerta. Camila se alejó de Lauren y vio a Keith entrar con un hombre mayor tras el.

-Necesito que me dejen a solas con la paciente- dijo el Docyor revisando la herida.

-¿Porque a solas? Creo que puede atenderla con nosotros aquí- dijo Camila desconfiada. Keith la miro confundido por su actitud y el
Doctor comenzó a sacar los instrumentos necesarios.

-Estando solo me concentro más, y será menos doloroso para ella- dijo el Doctor mirando a Lauren- Ojitos bonito, te pondré un sedando ¿bien? Contaré hasta diez y contaras conmigo hasta que te duermas- dijo.

Camila escucho como el doctor llamo a Lauren y frunció el ceño, Keith que la observaba hablo rápidamente.

-El doctor Maxwell nos atiende desde que éramos bebés- explicó Keith- Estás muy preocupada por ella ¿no?-preguntó.

-¿Tú no lo estás?- preguntó Camila con el ceño fruncido y Keith asintió lentamente.

-Camila, el doctor debe estar sacando la
Bala y cociendo la herida de Lauren. Se tardará mucho ¿que tal si vamos a comer algo y luego regresamos?- preguntó con una pequeña sonrisa.

Camila le dio una mirada irónica y se volteó mirando la puerta.

-De aquí no me muevo Keith- dijo Camila y Keith bufo sintiendo sus celos a punto de explotar- Creo que aquí debes tener comida, comamos aquí. Lo hemos hecho antes- dijo encogiéndose de hombros.

Keith suspiró y subió a su habitación mientras Camila se quedó al borde de la puerta esperando que las horas pasaran para poder ver a Lauren.

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3 horas después

Camila sentía como algo la novia suavemente pero sus ojos no se abrían. Luego, suaves voces empezaron a llamarla pero ella igualmente no respondía.

-¡Joven, Joven!- decía el doctor moviendo el pequeño cuerpo de Camilla con un solo dedo-¡Camila!- frito un poco más fuerte.

Keith bajo las escaleras y vio al doctor intentando levantarla.

-No se preocupes doctor, es muy difícil despertarla. Yo lo haré- dijo Keith cruzado de brazos- ¿Como está ella?- preguntó refiriéndose a Lauren.

-La bala no toco ningún órgano, tampoco lastimo algún músculo - explicó el doctor- Debe estar en reposo durante, mínimo, 3 semanas. Deje una nota con las pastillas que debe tomar para el dolor y la crema para que la herida cicatrice bien- dijo.

-Gracias Garret- dijo Keith. El
Doctor Maxwell asintió.

-¿Porque no la llevaste a un hospital?- preguntó Garret- Yo sé hacer estas cosas, pero creo que en un hospital lo hubieran hecho mejor y con más cuidado- dijo.

-Lauren le tiene fobia a los hospitales-dijo Keith diciendo un poco de verdad en eso.

Pero la verdadera razón era otra. Ya tenían suficiente problemas como para que la policía también estuviera detrás de ellos investigando quien disparo esa arma.

-Bueno, si ves que tiene síntomas extraños llévala al hospital por favor- dijo Garret despidiéndose de Keith.

-Lo haré, hasta luego Doctor Maxwell- dijo Keith despidiéndose. Luego se giró para levantar a Camila- ¡CAMILA!- gritó.

La morena se levanto de un brinco y miro a Keith asustada.

-¿Que, que? ¿Que pasó? ¿Lauren está bien?- preguntó Camila refregándose los ojos.

-El doctor ya terminó con ella- dijo Keith y vio como Camila corrió hacia la habitación.

Keith suspiró empezando a entender que era lo que pasaba entre esas dos mujeres.

Un ruido de escucho afuera y Keith vio a alguien corriendo con Thor ladrando detrás de el. Keith salió corriendo de la casa para perseguir a la persona vestida de negro.

-¡Hey detente! ¡Detente!- gritó Keith corriendo más rápido- ¡Atrápalo Thor!- gritó.

Cuando sus piernas no dieron más, se detuvo y la persona desapareció entre los árboles. Thor regresó a el con la boca abierta y un papel pegado en el collar. Keith lo agarro rápidamente y miro lo que decía.

Pobre Lauren, casi pierde su vida. Cuidado, tú también puedes estar en la lista.

Keith arrugo el papel enojado y corrió nuevamente hacia la casa para ver que las dos mujeres estuvieran bien.

-No voy a arruinar mi familia, no otra vez- dijo Keith con rabia- Y no voy a permitir que alguien más lo haga- dijo entrando rápidamente a la casa.

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-¿Pusiste el papel en el collar de Thor?- preguntó la voz de una mujer.

La persona vestida de negro, era un hombre. El hombre se quitó la capucha y le dio una mirada asesina a la mujer.

-¡Casi me atrapan por culpa de ese estupido Perro!- gritó el hombre.

-Baja la voz, mi cielo- dijo con voz dulce la mujer.

El hombre la miro mal, odiaba que usara ese tono dulce. La había ver más malvada de lo que era.

-No uses ese tono conmigo- dijo el hombre quitándose el resto de la ropa- Lo que sea que quieras seguir haciendo, lo haces tú. No pienso arriesgar mi vida por ti otra vez- dijo.

-Lo harás, oh ya sabes lo que puede pasar- dijo la mujer jugando con una pequeña cuchilla.

-¿Porque no lo dejas en paz y ya?- preguntó el hombre- Lo único que hicieron fue amarte y tú jugaste con ellos- dijo.

-Mi amor se lo entregue completamente a Keith, pero la perra de Lauren lo alejó de mí- dijo la mujer enojada- Ahora le quitaré a ella todo lo que quieres, aunque eso también conlleve a lastimar a Keith- dijo la mujer.

El hombre negó con la cabeza caminando hacia el baño.

-Estás mal de la cabeza mujer, estás muy mal- dijo el hombre.

La mujer lo miro y con una sonrisa malvada pasó el dedo por la cuchilla riendo.