Lujuria Adictiva

Capitulo 26

Antes que nada quiero decirles que este capitulo estará narrado por Alexa, Ruth Y Liam.

Desperté y como muchas veces ya Liam no estaba allí, se había ido, dejando una nota que al leer me hizo sentir una opresión en el pecho.

''Hermosa, mi deseo era quedarme contigo hasta que despiertes, pero debo de cumplir con mis deberes, luces maravillosamente bien aún dormida y con el pelo enredado, nos vemos al rato.

Posdata: Te prepare café.

Doble la nota y la guarde en mi bolso, prepare un bulto con las cosas que usaría en casa de mi madre, tome mi violín también, llevarlo conmigo me haría bien. Cuando estuve lista fui al colegio, hoy debía de entregar a Michael a sus padres adoptivos, despedirme de Mia, y dejar la nota a Ruth para que se la hiciera llegar a Liam. Las cosas se me pusieron un poco difíciles pues mi amiga no quería que me fuera.

—Alexa, por favor piénsalo Liam te ama, no te vayas así sin antes darle una explicación, él te va a entender. Sabrá que necesitas espacio y te lo dará, todos necesitamos explicaciones.

—Ruth necesito hacer esto, confió en ti que no le dirás nada, es mi decisión.

—Está bien, espero me cuentes de ti y como va todo, te quiero.

—También te quiero.

Le entregue la nota a Ruth al igual que recibí los padres adoptivos, Michael estaba súper feliz, y los Chevaliers se les veía ser buenas personas.

Emprendí mi viaje sin mirar atrás, mientras conducía lagrimas rodaban por mis mejillas, prendí mi radio y subí el volumen a todo dar, así mi sollozo se perdía con los sonidos de la música.

—Ruth—

Ver a Alexa partir de mi lado me dolió, estaba rota y se alejaba de la persona que le había hecho vivir momentos inolvidables, del hombre que podía unir cada pedacito de ella, no podía entender como estaba tan ciega y no se daba cuenta que ella le pertenecía a Liam y Liam a ella.

Llame a Diego para que me llevara al hospital, debía de entregarle la carta a Liam, y por ahora dejar las cosas fluyan solas, porque no me iba a quedar de brazos cruzados viendo como la vida pasaba y que Alexa no reaccionara, ahora debe de pensar en la vida llevaba dentro también.

—Ruth.

—Dime Diego.

—Nunca te vayas de mi lado sin darme una explicación, promételo.

Pellizque el hombro de mi novio y lo mire pestañeando rápido como una niña haciendo travesuras y le dije.

—Lo prometo mi cabeza hueca, y tú nunca me des razones para irme.

Mi Diego sonrió, me sentía afortunada, él era apuesto y me amaba. Para cuando llegamos al hospital mis manos estaban todas sudadas, había llegado el momento de romper el corazón de alguien, y aunque no sabía que decía la nota entendía que con solo el hecho de que Alexa se fuera sin despedirse personalmente era más que suficiente para que se pusiera mal emocionalmente.

—Diego espérame aquí, tratare de ser lo más breve posible.

Mi novio asintió y yo me introduje en el hospital, no hizo falta caminar hasta su consultorio pues Liam estaba en la sala de espera con una niña en brazos tratando de hacer que dejara de llorar, me conmovió mucho verle así, le saque una foto sin que se diera cuenta, más tarde Alexa la recibiría, Liam se giró hacia a mí y se sorprendió, camino hacia a mí sin soltar la niña.

—Hola Ruth ¿Qué te trae por aquí?

—Tengo algo para ti, si tienes un momento.

—Si claro.