capítulo 3

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Me levanto sobresaltada, tengo un mal presentimiento, pero lo desecho, solo estoy nerviosa por lo que sucederá hoy.

Trato de tranquilizarme, y me levanto tomo una ducha y me arreglo rápidamente, cuando bajo me encuentro con el desayuno servido y a Lili con una taza de café en sus manos.

Levanto la ceja interrogante y ella sonríe.

-ni me mires, no he sido yo, cuando termina de decir eso aparece Mat trayendo un plato de  fruta picada.

-bien dormilona, pensaba decirle a Li que fuera por ti, nos falta poco para irnos asi que es mejor que comas ya.

-a la orden capitán, finjo un saludo y me siento a la mesa, ellos ríen y comenzamos a desayunar.

Cuando aparcamos en un lujoso edificio respiro muy hondo, esto es difícil para mi.

Mat sale de su vehículo y ambos nos reunimos, me da una mirada cómplice, avanzamos.

Hay una secretaria que al verlo entrar se levanta rápidamente de su asiento y coloca una gran sonrisa en su cara.

-Señor Laurence es un placer volverlo haber, sigame por favor lo esperan en la sala de juntas, ella me mira y sus ojos se agrandan.

-perdo..ne, señorita no la vi, se disculpa,  alargo mi mano, un gusto soy Sahara, ella se sorprende y estrecha mi mano.

-Ana, señorita en cualquier cosa que le pueda ayudar solo digame, estoy a su disposición, asiento agradecida.

Ella comienza a caminar y nosotros la seguimos, es muy bonita y grácil en sus movimientos, tomamos un elevador y marca el número 24, cuando salimos me gusta lo que mis ojos ven.

Todo esta decorado de manera sencilla pero muy elegante, claramente al estilo de Mat, ella se detiene y nos hace un movimiento de cabeza.

-Señor Laurence, si necesita cualquier cosa digamelo.

El asiente y ella se marcha, abre la puerta y ambos ingresamos a la estancia.

En ella se encuentra una gran mesa en forma de rectángulo de color negra y a su alrededor hay por lo menos 10 personas, todas dejan de platicar y nos miran.

Siento como 10 pares de ojos nos observan directamente, antes me acobardaria pero ahora me coloco mas derecha y con la barbilla en alto.

-Lamento la tardanza, ya que estamos  todos juntos les presentó a Sahara Capris mi asistente, ellos me saludan y yo asiento.

Mat se coloca a la cabeza y yo a su lado, los demás se sientan nuevamente y comienza la reunión, yo hago anotaciones de todo lo que van diciendo, hasta que levanto la vista por que siento que alguien me esta mirando.

Efectivamente hay un hombre mirándome directamente, lo observó tiene un cierto atractivo pero su mirada refleja curiosidad he inteligencia, frunzo el ceño, me esta examinando como a un animal extraño.

Retiro la mirada y comienzo de nuevo a anotar.

La reunión tarda mas de lo esperado pero cuando finaliza doy un suspiro de alivio.

Mat se levanta y todos hacen lo mismo.

-Bueno, habiendo tratado todo lo necesario, es hora de retirarnos, ha sido un placer señores.

Se acercan a estrechar la mano de Mat y a depositar un beso en mi mejilla.

Cuando creo que son todos, una mano me detiene y lo reconozco es el tipo que no ha dejado de verme.

-ha sido todo un placer conocerte, su voz es fuerte y varonil, mi nombre es Alexander Santander, estoy a tu servicio.

-lo miro fijamente de nuevo y descubro que sus ojos son de un tono gris oscuro, casi negro, pero lo que mas me sorprende es la forma en que sonríe, me distrae por un momento, inexplicablemente siento una conexión con él.

-El placer a sido mio señor Santander.

El extiende su sonrisa y yo Contengo el aliento.

-espero que nos volvamos a ver muy pronto, hasta entonces, toma mi mano y planta un beso en ella, después de eso lo veo alejarse.

-Saha, ¿éstas bien?, me sobresalto y veo a Mat mirándome, me sonrojo y asiento.

-No es nada Mat, creo que lo mejor es irnos, recuerda que tenemos la presentación en 2 horas.

El asiente y ambos nos vamos a casa.

CORAZÓN CAMBIANTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora