Era sabado, después de aquella fiesta, y en Barcelona llovía un montón. No se podía a penas salir a la calle y estaba bastante aburrida en casa.
Marco Sergio y Aly estaban de resaca, por lo que Elettra Aless y yo decidimos quedar para ver una película en la casa de la primera.
- ¿Que quereis ver?- dijo Elettra mientras cogía su portatil, para conectarlo en la televisión.
- ¿Que os parece hacer maratón de American Pie?- dijo Aless.
Elettra y yo nos quejamos porque no eramos fans de ese tipo de peliculas, pero por la insistencia de Aless y porque a ambas nos gustaban las comedias americanas terminamos aceptando.
Preparamos las palomitas y apagamos las luces. La cama de Elettra era increiblemente grande y comoda y entre eso y la pedazo de televisión que tenía parecia que estabamos en el cine.
Aless y yo nos recostamos al lado, apoyados en unas almohadas que se encontraban en el respaldo de la cama. Y Elettra en el medio de mis piernas con su espalda apoyada en mi torso. Sin saber porqué esa se había convertido en una posición habitual para nosotras.
Nos tapamos los tres con una manta porque hacía bastante frio y nos pusimos a ver la película.
En la mitad de la primera película, Aless se quedó totalmente dormido.
- Mira este- le dije a Elettra en voz baja- tanto quería ver la peli y ahora está frito.
- Espera un momento- dijo ella incorporandose.
Cogio una regaliz de las chucherias que habiamos comprado y se la metio en la boca. Al instante aún dormido, Aless hizo un ruido muy raro que provocó en nosotras una carcajada.
- Shh - rei- lo vamos a despertar- susurré en bajito, mientras Elettra se volvia a recostar apoyada en mi y dirigía su vista a la pantalla.
Con mis manos rodee su cintura y apoyé mi cabeza en su hombro de forma cariñosa. Ella al instante llevó su mano a las mias y me las acarició. Este gesto me hizo recordar al de la noche anterior.
- ¿Tu tienes algún tatuaje? - dije susurrando
- No, ninguno. Solo piercing - me contestó.
Sabía que tenía uno en el brazo y dirigí mi mano hacia el.
-¿ Solo este no?- le dije aún tocandolo.
- Uno más - me contestó.
- ¿Donde? - le pregunté curiosa
- No te lo digo
- ¿Como que no?
De repente Aless hizo un pequeño movimiento y decidimos bajar la voz para no despertarlo.
-¿ Como que no? va dime- dije susurrando en su oido, que lo tenía justo a la altura de mi boca.-Seguro que lo tienes por aquí- dije tocando sus brazos para buscarlo.
- Frio - dijo siguiéndome el juego.
Deslicé mi mano por su abdomen llegando a su ombligo.
-¿ Aquí? - dije tocándolo y haciéndola reir.
- Nop, no lo vas a asertar- me susurró.
Subí la mano y antes de llegar a su escote, frené.
- Caliente - me dijo ella.
Sin saber como iba a reaccionar, llevé mi mano a su pezón derecho, dandome cuenta de que no llevaba sujetador y lo senti endurecerse. Más bien podría decir que los sentí , porque en mi cuerpo obtuve la misma reacción. -
- Emm- dije tragando saliva- aquí tam..poco
- Es.. en.. el.. o.tro - dijo ella trabandose también.
En la habitación se podían escuchar nuestras respiraciones entrecortadas. No se porqué pero no lo pude evitar y llevé mi mano a su otro pecho. Esta vez ya no tenía sentido el juego pero aún así no quise parar.
- Me he quedado sleeping babys - Dijo Aless haciendo que apartase mi mano de golpe.
¿WTF? ¿ Que coño había pasado en esa habitación?
Desde luego que algo normal no era. La peli ya habia terminado y yo no me había dado ni cuenta. Aless encendió la luz.
- ¿Por qué estais tan rojitas las dos? - dijo inocente sin ser consicente de nada de lo que había pasado.
Elettra se levantó de golpe todavía mas sonrojada. - Hasee mucho calor parseeros- dijo alterada y dandome a entender que estaba muy nerviosa.
-¿ Calor? Debes de estar enfermita, porque hace mucho frio baby.
Fuimos a la concina y nos servimos un poco de ensalada de pasta que había hecho la madre de Elettra. La verdad es que estaba realmente buena.
Al cabo de un rato llegaron las dos hermanitas pequeñas de Elettra y comencé a jugar con ellas. Deje mis cosas en la mesa con Aless y Eli y me dirigí al salón. En los ojos de Elettra pude ver ternura y sonrei. Me encantaba que me mirase de esa forma.
Después de unos 15 minutos volví a la cocina y no me podía creer lo que estaba escuchando.
- Por favoor Aless, que asco.¿ Quien le dice eso a su novia por muy cachondo que esté?, ¿ Y que novia lo permite? Buagg
- No se baby, no es nuestro asunto.
Estuve unos segundos escuchando las barbaridades que soltaba Elettra. Hasta que pude comprenderlo todo.
-¿ Que cojones estas haciendo con mi movil ? - dije gritandole
Ella parecio asustarse con mi reacción y no me extraña pues estaba totalmente cabreada.
- ¿ Que dices tía? - me dijo.- Sonó y te lo iba a llevar pero..
- ¿ Pero prefieres cotillear y soltar mierda por la boca no?
Le arranqué el telefono de la mano y me fui pitando de aquella casa, no sin antes dar un portazo.
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Young
FanfictionElettra lamborguini se traslada a Barcelona, por el trabajo de su familia. En su instituto conoce a muchas personas que formaran parte de su nueva vida durante un tiempo. Entre ellas, Alexandra.