Capítulo 3

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(Selene)


Me subí en el asiento de copiloto, ya que Niki tiene miedo de mi manera de conducir. Cree que desde que casi tuvimos un accidente le da derecho a decir que no tocare un volante en su presencia.

Pero... ¿Qué quiere que haga? No tengo carnet aprendí a conducir con los coches viejos que robaba con el viejo, practicando en los descampados. Quemé muchos motores antes de aprender a llevarlos con cierto manejo.

A día de hoy ya manejo bien, pero tengo tendencia a correr a máxima velocidad, cosa que Niki tampoco aguanta.

En cuanto puso el coche en marcha, vi a un lobo enorme y cuando digo enorme es E-NOR-ME, creo que es tres veces más grande que los que se ven en las fotos, aunque no los puedo comparar es el primero que veo en persona. Impresiona mucho, impone su tamaño.

-No sabía que había lobos en este lugar.

-Y no los hay, que yo sepa.

-Pues si hay uno allí, es enorme –digo señalando hacia atrás.

-Qué raro... –dice viéndolo por el retrovisor.

-Por cierto podría llevar yo el coche, te veo cansado –digo con humor cambiando de tema.

-No quiero tener un accidente gracias –dice poniendo una sonrisa en su boca.

-Eso solo fue una vez y te recuerdo que no pasó nada.

-¿No pasó nada? ¿Quieres que te recuerde como quedo el lateral del coche?

-Le hice un rasguño de nada...

-Te recuerdo que tuve que salir por la ventana porque la puerta ni se abría –me interrumpe riendo.

-Casi te caes de culo al suelo –recuerdo riéndome a carcajadas.

-Calla mal bicho.

En verdad ese accidente no fue nada. Yo apenas tenía experiencia y Niki me dijo que condujera yo que así practicaba. Íbamos camino al centro comercial, poco a poco iba aumentando la velocidad. Niki me iba diciendo que bajara la velocidad, yo simplemente me reía.

De repente me salte un stop y gire el volante porque me asuste e hice que el coche diera contra otro bastante fuerte.

Por suerte ni al otro conductor ni a nosotros nos pasó nada. Eso si el viejo tuvo que pagar una buena cantidad por la multa. Y la única bronca que me lleve me la dio Niki por casi matarle, pero nada más.

Llegamos a la mansión, me baje del coche, di indicaciones a los chicos para descargar los paquetes del furgón y los llevasen a su sitio y entré seguida de Niki.

-Ya hemos llegado –grite.

El viejo apareció con una sonrisa en la cara, por el pasillo que da a su despacho.

-¿Cómo ha ido todo?

-Sin problemas –contesto serio Niki.

-Me alegro, quería consultar una cosa con vosotros y Styles.

-¿Pasa algo? –pregunte con preocupación.

-Tranquila no es nada que no podamos solucionar.

Fuimos al despacho, en el cual Styles ya estaba allí esperando. El viejo se puso en su asiento tras la mesa.

-Sentaros –ordeno.

Nosotros tres nos sentando ocupando los sillones de enfrente, dejándome a mí en medio como siempre.

-Estamos empezando a tener pérdidas por culpa de una droga nueva que afecta a algunas personas de manera muy agresiva, puede provocar una sobredosis de un solo tiro y no acaba bien.

-Así que hay una droga que mata a la gente ¿y por eso ha bajado nuestras ventas? –pregunte.

-Eso mismo y quería ver si teníais idea de que es.

-¿La gente prefiere una droga que mata a comprar la nuestra? –pregunto Niki confuso.

-Abreviando si es eso.

-No lo entiendo ¿la gente es tonta o qué? –pregunte frunciendo el ceño.

-Solo es mortal al segundo tiro, pero es adictiva, provoca un estado de éxtasis durante más tiempo que la droga normal, además como solo afecta a algunas personas la gente se la juega y muchos acaban mal.

-¡Vaya! –exclamo sorprendida por la estupidez humana.

-¿Tenéis idea de que podemos hacer al respecto? Porque a la larga esto nos acabara afectando.

-¿Y si encontramos a los que la fabrican y les reventamos? –pregunto Styles.

-No creo que sea tan fácil no quiero agredirles con que dejen su negocio me vale –ríe el viejo

-Siempre los puedes poner en el mismo coche con Sel, seguro que los acojona para siempre –dijo Niki haciéndose el gracioso, le pegue una colleja.

-Dejar las tonterías para otro momento –ríe el viejo- ¿Qué opinas tú, Sel?

-Podríamos...

Me quede pensando en lo que iba a decir, ya que sabía que no me lo preguntaba por saber. Yo sabía que me lo preguntaba a modo de prueba por ser su sucesora, me tendría que esforzar más que nunca. Deje las bromas a un lado y pensé en como actuaria él.

-Boicotear sus suministros, quiero decir, si ellos no pueden comprar droga para modificarla no podrán venderla.

-Me gusta, ¿Cómo lo harías?

-En su próxima entrega aparecer y hacer que su proveedor no quiera volver más, ya que no se fiara de ellos.

-Pues ya sabéis chicos poneros manos a la obra, quiero saber cuándo y dónde se hará la próxima entrega.

Niki y Styles hicieron un asentimiento de cabeza. El viejo con un gesto les ordeno que se fueran, y se fueron dejándome a solas con él.

-¿Tienes algún otro trabajo en el que te pueda ayudar? –pregunte.

-Puedes descansar solo hare los números del día de hoy.

-Déjame a mí, no tengo sueño.

-Recuerda que mañana tienes que ir al instituto.

-Lo sé –digo rodando los ojos- Pero también te digo que el maquillaje tapa muy bien las ojeras.

-Como quieras, mañana lo revisare.

-¿Qué pasa no te fías o qué? –pregunto levantando una ceja.

-Claro que me fio, pero cualquiera puede tener errores y de ellos aprender –al viejo le encanta ir de filosofo.

-Si claro.

Me levante del sillón y él de su sitio me dio un abrazo un beso en la frente. Rodee la mesa y me senté en su sitio.

-Llamare a alguien para que te traiga algo de cenar –dijo antes de salir del despacho.

En cuanto me quede sola me puse manos a la obra con los números.


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