¡Castle Wars!

Kai, El Caballero Verde

-Me llamo Kai y tengo mejores cosas que hacer.

-Muchos piensan que soy un testarudo, que siempre hago lo que quiero, pero están equivocados. -Digo mientras tomo puntería con mi arco-

Logro ver que mi objetivo, un ladrón, se esconde entre los arbustos.

-Es solo que cuando nadie toma cartas en el asunto -Disparo la flecha- Yo solo hago lo que se debe hacer.

La flecha cae dentro del bosque y después se escucha un grito.

-A veces no es fácil ser el mejor, pero ¿que puedo decir? Se hace lo que se puede.

-Nadie te preguntó nada de eso, todo lo que te dije es que el rey te llama.

Tomé mi arco y disparé al cielo con mucha fuerza, estábamos en un balcón, después entré al castillo caminando.

-Idiota. -Dijo el caballero gris que se quedó en el balcón-

La flecha cae de nuevo y se incrusta en el pie del caballero gris.

-¡AHH-

Ya en la habitación del rey.

-¡No voy a ir en un viaje de 3 días al reino de lava para entregar un simple mensaje! -Grité enojado-

-No está a discusión, Kai, entregaras ese mensaje. -Respondió el rey-

-¿Qué hay de los mensajeros? ¿Para qué les pagan?

-Kai, ¡no lo toleraré más! O entregas ese mensaje ¡o te destituyo de tu puesto en la caballería!

Enojado tomé el mensaje y un trozo de tela que estaba en la sala.

-¡Kai!

Ignoré al rey mientras ataba el mensaje a una flecha utilizando la cuerda.

-¡Kai no te atrevas!

Caminé hasta la puerta.

-¡Entregaré esto a mi manera! -Dije mientras salía de la sala del rey-

Me dirigí a la sala de investigación y abrí la puerta.

-¡Cartógrafo! -Grité-

Un hombre que estaba sentado con un pincel en la mano volteó.

-Toma un mapa del recorrido del reino al reino de lava y ven conmigo. -Dije y después salí de la habitación-

Empecé a caminar por el pasillo y escuché que la puerta volvió a abrirse con pasos detrás de mí.

El cartógrafo me alcanza y camina a mi lado, lo veo y le quito el mapa, el sigue caminando conmigo.

Abro el mapa, reviso la escala, cuento los kilómetros.

-Noventa y ocho kilómetros desde la entrada del reino hasta la entrada del reino de lava. Gracias. -Devolví el mapa al cartógrafo deteniéndolo por completo-

Seguí caminando y subo las escaleras a una torre.

Salgo de la torre y la escalo hasta lo más alto.

Me pongo de pie sobre la orilla plana que tiene la cima de la torre, es una larga caída.

El viento sopla fuerte a esta altura.

Saco mi arco y el mensaje atado a la flecha.

-Noventa y ocho... En esta dirección.

Pocisiono el arco en la dirección correcta y disparo la flecha.

-Esperemos que caiga en el sitio correcto

Un caballero gris se asoma al techo donde estoy.

-Kai, el rey te busca. Lo hiciste otra vez ¿verdad?