EL VIAJERO (HISTORIA 2)

CAP. 28 ENCUENTRO MORTAL

Regresaron con los demás luego de aquel abismal espectáculo, el desconcierto y preocupación de Shining Armor crecieron aun mas con las palabras de aquellos ponis, ¿a donde iba todo esto? ¿que querían lograr?.

-¿Encontraste algo hermanito?- pregunto Twilight

-Si, abajo del ayuntamiento de este pueblo hay una especie de iglesia subterránea.

-¿Iglesia?- pregunto Applejack- ¿Quien henos construye una iglesia en estos días?

-Las creencias religiosas en Equestria terminaron hace ya mas de 2 siglos, ¿a quien henos estarán adorando esos maníacos?

-No tengo ni idea, pero debemos de irnos de aquí ya.

El grupo tomo sus pertenencias y decidió salir lo mas antes posible de aquel desolado lugar. Twilight seguía pensando en los responsables de aquella indiscriminada matanza, los 3 sujetos colgados, de seguro ya todos habían muerto o habían sido raptados por aquella cosa.

(...)

El calor se sentía en su máximo apogeo, Aiden y los demás revisaban el mapa de la zona antes de partir.

-Appleloosa se encuentra a 3 km de esta choza, máximo serán unos 30 min de caminata, si nos apresuramos, llegaremos allá antes del anochecer.

-¿Y que haremos cuando lleguemos allá?- pregunto Star.

-Si queremos llegar a las montañas del este, entonces tendremos que recoger recursos, y estoy seguro de que en Appleloosa nos lo darán

-Y ¿como estas seguro de eso?, los habitantes de Appleloosa tienden a ser muy tacaños- dijo Shadow.

-Si no pasa eso, entonces lo robaremos, al fin y a cabo ya estoy acostumbrado a romper la ley.

-Interesante- dijo Star- Tenemos a un ex convicto aquí Shadow.

-El no es un criminal Star, el solo sobrevive con sus instintos y no le importa que dañe a otros con el fin de protegerse así mismo y a los que le importan.

-Muy bien entonces- interrumpió Aiden un poco incomodo por los comentarios- Si se nos niegan a dárnoslo, lo robaremos todo ¿hecho?

-Hecho- respondieron los 2

Después de eso, ambos ponis fueron a recoger sus pertenencias, Aiden subió hasta la sala del segundo piso, se metió al segundo cuarto y comenzó a observar la vista panorámica que ofrecía la ventana de ese lugar, el desierto, blanco, seco, desolado, casi podía sentir el aroma de su sudor y el cansancio de su cuerpo con tan solo ver el enorme firmamento que se extendía hasta el horizonte sin fin alguno, dio un suspiro y pensó el Luna y su deshonrosa acción de abandonarla, se preguntaba en donde podría estar su amada, y si estaba a salvo o no, eso era lo que mas lo abrumaba, el hecho de no saber nada de ella, sin mas, bajo hacia la entrada y salio junto con sus nuevos colegas.

(...)

El desierto comenzaba a castigar su cuerpo y su mente solo pensaba en el, no podía dejar de volar pero las alas le dolían como nunca, los abrumadores rayos solares quemaban lentamente sus alas y su lomo mientras ella resistía.

Luna estaba muy cansada, ya ni siquiera era el hecho de lo furiosa que estaba con Aiden, solamente quería descansar, acostarse, beber agua, como deseaba el agua en ese momento, tan siquiera una gota para que refrescara su resecada garganta.

En eso, a lo lejos, logro distinguir unas sombras brumosas en la blancura intensa del desierto, la princesa Luna había llegado a Appleloosa, sin mas remedio, aterrizo en medio de este, todos los ponis se le quedaron viendo sorprendidos, casi que agarrados de casco, ante la enorme sorpresa que era recibir a una princesa en el pueblo mas desolado de Equestria.