Jasper Frost

I

              
Las Vegas, Nevada.





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-- ¿Que mierda haremos hoy Frost?—Preguntó Travis, mirándome con cara de mierda,  era uno de mis mejores amigos, confiaba en él a ojos cerrados, sólo que nadie lo sabía.

 --No sé tú pero yo voy a Le Cirque, Samantha me espera—lo miré a los ojos porque  ya sabía cuál era su opinión respecto a ella y no me importa. 

 -- Contesta el móvil -- dice Travis irritado, sacándome de mis pensamientos

 -- Frost--

 Inversionistas Japoneses me estaban esperando en una reunión que era de mi Padre, le dicimos inversionistas a los estafadores importantes de otros continentes, la gente ludópata es fácil de estafar más si se trata de gente muy rica de todo el mundo.

-- Frost no sé si sabes pero nuestra próxima observación va hacia Fontaine, un Magnate Holandes, tenemos todo planeado, sólo necesitamos que autorices a tus hombres y entramos al juego— sonrió Sergi, un empleado de Zayoko  el líder Japones.

 Todo el mundo se siente intimidado por mí, realmente no sé por qué, no niego que no me guste cuando se ponen nerviosos  o  cuando hablo cerca, incluso llego a encontrarlo algo encantador. 

-- ¡No!—grité enfurecido.

– Este es mi plan, mi estafa y se hará lo que quiera cuando quiera,  necesito algo más grande, ya hice desaparecer la fortuna de 4 Rusos en menos de 1 mes, es momento que demos un salto a la grandeza, que seamos recordados por siempre, Fontaine es como robar un banco y no creo que hayan viajado tantas horas para darme esta mierda de oferta-- di un fuerte golpe en la mesa con mi puño.

--Cuando hagan bien su trabajo me llaman—los dejé a todos impresionados, nada nuevo para quienes me conocen. 

Estos jodidos de mierda arruinaron mi día, lo último que necesito es arreglar problemas de otros, en estos momentos odio a mi Padre por hacer mal su trabajo, he pensado millones de veces en retirarme, tengo tanto dinero que no necesito trabajar más, solo vivir.