Híbrida Posesiva - #3 [TP]

¿Familia?

Me removí en la superficie blanda buscando algo pero al no sentir nada mas que las sabanas abrí de apoco los ojos encontrando la soledad. Me senté en la cama con un dolor de cabeza y una confusión palpable. Creí que al despertar la chica rubia estaría aquí pero veo que no, y sentí un pinchazo en mi pecho, no se que fue pero no me gusto nada. Me levante y me vestí, salí del cuarto de hotel a la recepción, me acerque a la recepcionista.

-Buenos días-digo amable, ella me mira.

-Buenos días joven-dice la señora de no mas de cuarenta años.

-¿Sera que usted no vio a una chica rubia, delgada, ojos azules...?

-Las veo muy seguido joven-interrumpe la señora divertida, chasqueo la lengua-¿Me hablas de la que vino contigo anoche?-la observo-Yo los atendí-sonríe cálida.

-Ah... Si ella-contesto.

Ella ríe.

-La vi, salia como nerviosa, preocupada, algo así...

-Ahm, gracias-sonrío un poco.

-Me dejo esto para ti

Mi corazón latió fuerte. La mujer me paso una nota.

-Muchas gracias-le digo alejándome sonriente.

Lamento mucho irme sin decir nada.
Lo que pasa es que no podía quedarme contigo ahora.
Prometo que nos volveremos a ver, solo ten paciencia.

Con amor, Michelle.

Sonrío feliz y consigo un taxi para ir a casa.

***

Pago al taxista y bajo, entro a casa encontrando en la sala a mi madre caminando de un lado a otro con mi padre tratando de calmarla.

-Lu, calmar. Daniel ya es mayor...-le dijo mi padre cansado.

Carraspeo llamando la atención de ambos.

-¡Daniel!-grita mi madre corriendo a mi para abrazarme con demasiada fuerza.

-Ma-má... me... asfixias...-balbuceo.

Se aleja y respiro, la miro ella solo me mira molesta.

-¿Donde andabas? Te dije que llegarás temprano ¿Sabes que hora es? Van hacer las 12 ¿Porque tienes un morado en el cuello? ¿Con quien andabas? ¡Responde porque...!

-¡Lu! Dejalo, ya no es un niño-interrumpió mi padre.

-¡No me digas que hacer! ¡Es mi hijo!-le respondió enojada, hago una mueca cuando el dolor de cabeza aumenta.

-También es mi hijo Lu... Solo dejalo que se de un baño primero, coma y hable después...-aconseja y le levanto los pulgares guiñándole un ojo ante la buena idea.

Mi madre suspiro resignada antes de voltear a verme.

-Ve a tu habitación-ordenó severa, sin rechistar subí las escaleras.

***

Salí de mi cuarto y fui a la cocina donde estaba mi madre sirviendo la comida y a mi padre observándola desde la mesa del comedor.

-Aquí estoy-anuncie.

-Sientate-obedezco a mi madre y me siento a un lado de mi padre.

Mi madre sirvió la comida, le dio un plato a mi padre, uno a mi junto a una taza de café, se sirvió para ella y se sentó frente a mi.