Llegada

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Capítulo 1.

Desperté. Eran las 7:00 am, los vampiros no dormimos mucho y solo lo hacemos por placer o costumbre, a veces solo por adaptarnos al mundo de los humanos. Me bañé y me vestí rápidamente.
Entré en mi auto y una rica fragancia a vainilla invadió mis fosas nasales, me fui sin mirar atrás, de todas formas no tenía nada por lo cual regresar excepto las visitas que había prometido a mi mejor amiga. En un tiempo estimado ya estaba en la prestigiosa "Academia Bleed".

Estacioné el auto y entré, era acogedor y se notaba que era aproximadamente del siglo XV pero estaba muy renovado, tenía mucha tecnología alrededor.

Entré a un salón principal y llegó la directora.

—Buenas noches, soy su coordinadora Grace, espero disfruten su estadía aquí porque serán 2 largos años. —Hizo una pausa como si analizara a cada uno de los presentes— Ahora les presento a sus profesores: él es Harry, su profesor de anatomía vampírica, Frank, su profesor de idiomas, Aron su profesor de manejo de dones, Nick, su profesor de ed. Física vampírica y Tony, su profesor de cuidado de la salud.

—Son lindos, ¿no lo crees?

Volteé y una chica de ojos esmeralda me observaba fijamente.

—... Sí, lo son.

—Lo siento, no me he presentado, soy Amber Cowell.

—Catalaia Black, un gusto.

—Mm... Me imagino que ya tienes con quien compartir la habitación...

—No. ¿Te parece si la compartimos?

—¡Claro!

Llegamos a la habitación asignada. Era espaciosa, con dos camas estilo victoriano, tocadores y un baño, además de dos armarios de tamaño medio, en conclusión: era enorme. Me di un baño y comencé a entablar conversación con la misteriosa pero extrovertida chica, en poco tiempo logramos llevarnos bastante bien, había una conexión que ni ella ni yo nos explicábamos, fuimos a dormir y al otro día tomé un baño, me vestí y esperé a Amber  para ir a nuestra primera clase, teníamos anatomía vampírica y sentía mucha curiosidad por cada una de las asignaturas, era extraño que hasta los vampiros tuvieran una organización escolar. Decidimos sentarnos adelante, llegó el profesor y comenzó la clase.

—Buenos días. No esperen que los llame "alumnos", no soy un anciano. Mi nombre es Harry Evans y yo les ayudaré a aprender todo sobre la anatomía vampírica. comencemos la clase.

—Whoa, si fuera humano ya habría jugado con él, qué delicia. —Comentó una voz desde la parte de atrás.

Como todos sabemos esta es la edad de la "rebelión vampírica", algo así como la adolescencia humana, tienes que saber controlarte y aprender a manejar tus impulsos, por lo que había escuchado en los pasillos el don del maestro se basaba en el equilibrio y la escucha, decían que podía oír lo que decían más de 100 metros de distancia, teniendo en cuenta esa información estaba segura de que escuchó lo que dijo la chica.

Yo tengo el don de ver el futuro, leer la mente y detectar el aura de las criaturas.

—La escuché, señorita Bryttany.

—No he hablado. —Dijo la chica con sarcasmo.

—Sí lo hizo, gracias a su sarcasmo se acaba de ganar un trabajo sobre el origen de la anatomía de 40 páginas, y espero que no proteste.

Fuimos a comer luego de terminar la clase, mi bebida preferida es el jugo de glóbulos rojos. Me encontraba comiendo con Amber y a nuestra mesa se sentó nuestro maestro de anatomía.

¿Qué? ¿Era eso posible? ¡Por favor, eso sólo pasa en los libros!

—Glóbulos rojos, me has leído la mente, Catalaia. —Dijo sentándose a mi lado.

—Leo los pensamientos, pero no atiné a leer el suyo. —Comenté burlesca.

—Los glóbulos rojos son los mejores para el cuerpo, además de ser deliciosos.

—Buen dato.

Amber lo miraba con extremo cuidado.

—... Maestro... ¿Puedo preguntarle hace cuántos años se convirtió?

—A  los 19, hace 93 años, ¿y tú?

—A los 19, hace dos años.

—En vista de que tenemos la misma  edad, esperemos convertirnos en buenos amigos, soy nuevo aquí y no quiero que me vean como el amargado maestro de anatomía.

—¿Por qué se esfuerza en ser bueno con nosotras?

—Tienen aspecto de ser buenas chicas, espero no llevarme una sorpresa.

—Entiendo, maestro.

—Solo dime Harry, no me gustan las formalidades.

—Está bien ... Harry.

Nos despedimos y salimos de la cafetería.

—Eso fue extraño... ¿Verdad? —Replicó Amber.

—Sí que lo fue.

—Espero no esté comenzando a gustarte, querida. —Dijo con una ceja arqueada.

—¿De qué hablas? Estás loca. —Dije con gracia.

Rió.

—Como digas.

Llegamos al pasillo y posteriormente entramos a clase de Ed. Física vampírica.

Academia Bleed (Versión física disponible)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora