Revancha por tu amor

Capítulo 12 .- Tregua.

Los personajes que aparecen aquí son obra de la gran Naoko Takeuchi, la historia es creación de mi loca imaginación.

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Serena cerró la puerta con violencia, se encontraba bastante ofuscada, después de su acalorada discusión con Darien. Sin pensarlo se acercó a la ventana y de un tirón la abrió por completo, dejando que el aire fresco aliviará el calor que la había asaltado con su acalorada perorata, cerró los ojos con fuerza recargándose en el marco de la ventana, intentando recuperarse del pequeño mareo que le había asaltado.

―¡Abre la puerta! ―Gritó Darien al otro lado, mientras se escuchaba como intentaba abrir la puerta jaloneándola, Serena lo ignoro, pero él no se dio por vencido ―Serena, maldita sea... ¡Abre la puerta!

―¡Lárgate! ―Gritó Serena desde donde se encontraba.

―Abre la maldita puerta ―Volvió a gruñir Darien pero Serena volvió a ignorarlo ―Molí...

Serena escucho como los gritos de Darien se alejaban con rapidez, respiro satisfecha, si era honesta consigo misma, se sentía bien, aunque no entendía aquel extraño placer que le ofrecía lo que acababa de hacer, debería estar molesta por el trato que Darien le estaba ofreciendo y aun que él creyera que tenía motivos para hacer todo lo que estaba haciendo, eso no la hacía sentir mejor, pero muy en el fondo se sentía liberada, liberada por hacer algo que jamás se había atrevido, por decir lo que pensaba y sentía en aquellos momentos.

Serena no era responsable de nada de lo que Darien le acusaba, y aun así en el fondo podía entenderlo, podría imaginar lo que sería un trato como el que le habían dado a Darien en el pasado, sabía que era su amor por él el que hablaba, pero no podía evitarlo, le amaba y pasara lo que pasara le seguiría amando.

Y a pesar de todo el amor que le tenía, sabía que no podía permitir que Darien la siguiera humillando de aquella forma, no podía permitir que Darien la tratara como si ella no valiera nada. Sabía que sus palabras habían sido bastante arrebatas y poco honestas, pero había encontrado en aquellas palabras una manera de defenderse, de no ceder ante Darien, y solo decir sí a todas sus peticiones.

Estaba segura que Darien no entraría en razón tan fácilmente, y mucho menos cuando se negaba a escucharla y hablar de lo que había ocurrido en el pasado.

Serena se dio cuenta de que hasta el momento solo sabía la versión de Diamante, Darien no le había hablado de nada de aquello... Tal vez la versión de Darien le explicaría que había tenido que ver ella para que él la condenara de aquel modo... Algo que también explicara eso que Darien había dicho: el premio.

Hizo una mueca mientras comenzaba a desnudarse para darse una ducha, estaba acalorada y sudorosa. No creía que fuera fácil poder entablar una conversación cortes con Darien, no después de su arrebatada actitud, como para poder pedirle que le hablara del pasado.

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Apenas unos minutos después, Serena salió de la ducha envuelta en una toalla, saco algunas prendas para ponerse depositándolas en la cama con descuido, y sin pensarlo dejo caer la toalla a sus pies con la intención de comenzar a vestirse.

De pronto Serena se sobresaltó, cuando con un estrepito sonido la puerta se abrió de par en par.

―Sere... ―La voz furiosa de Darien se perdió cuando sus ojos se toparon con su cuerpo desnudo. Serena enrojeció con violencia, cuando se dio cuenta de su desnudes, de la que se había olvidado debido a la distracción de la puerta.