Los personajes que aparecen aquí son obra de la gran Naoko Takeuchi, la historia es creación de mi loca imaginación.
Prohibido copiar, transcribir, alterar, almacenar o publicar esta historia en cualquier plataforma o grupo, sin mi autorización previa y por escrito.
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Serena bajo lentamente las escaleras hacia el comedor, donde comería con Darien, como le había informado Molí. En aquellos momentos se sentía tan confundida y deprimida que no tenía ganas incluso de bajar a comer.
Después de aquella noche, Darien se había ido por una semana entera y no había sabido nada de él durante esos días, no sabía que habían significado para él sus palabras, Darien no había dicho nada, lo único que había hecho fue llevarla a su habitación y después al día siguiente se había marchado. Había huido, sin siquiera exigir ni explicar nada.
Suspiro con pesar, Darien estaba siendo cobarde al no pedir una explicación, a no afrontar lo que había ocurrido en el pasado, pero también era honesta y sabía que ella también era una cobarde, por no enfrentarlo, pero tenía miedo de que lo poco que había conseguido se fuera al demonio. Estaba confundida.
No comprendía, no comprendía nada.
Incluso no se comprendía a ella misma, no comprendía aquella necesidad que comenzaba a sentir por él, aquel dolor que llevaba consigo... Simplemente no lograba comprenderlo.
―Hola ―Saludó insegura, sin saber que actitud debía tomar ahora con Darien, mientras tomaba asiento a su lado.
―Buenos días Serena ―Contestó Darien con una sonrisa.
Serena se dedicó a juguetear con su comida un rato, sin saber aún que decir ―Molí me ha dicho que no has comido muy bien estos días... ―Dijo Darien, pero ella no le respondió nada ante aquella afirmación, porque a fin de cuentas era verdad ―Disculpa que me haya ido sin decir nada... Pero tuve algo importante que resolver en Londres ―Añadió con una sonrisa en los labios.
―No tienes que darme explicaciones ―Dijo Serena mientras se levantaba de la silla, ya no soportaba más estar ahí, sentía sus ojos anegados en lágrimas y aun que no entendía el por qué, sabía que necesitaba salir de ahí.
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Serena paso toda la tarde en su habitación, intentando entender que era lo que le hacía sentirse tan terriblemente mal.
No quería pensar que se trataba de que Darien se hubiera marchado a Londres y no la hubiera llevado con él, pero sabía que probablemente aquello era solo una de las mil cosas que aún no lograba entender.
Lo único que deseaba era que Darien la tomara entre sus brazos y le ofreciera el consuelo que en aquellos momentos tanto anhelaba. Con aquellos pensamientos se metió en la cama, intentando conciliar el sueño.
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Ya más entrada la noche Serena despertó de pronto, sus ojos miraron alrededor dándose cuenta de que aún era de madrugada para levantarse, así que se acomodó arropándose entre las sábanas para continuar durmiendo.
Pasaron varios minutos cuando al fin, se dio por vencida de dar vueltas en la cama intentando dormir, su estado de ánimo solo lo empeoro todo, ya que si seguía en la cama sabía que se echaría a llorar.
Entonces decidiendo que no podría dormir pronto y dándose cuenta de que tenía hambre, ya que casi no había comida nada en todo el día, decidió ir a buscar algo, así que entusiasmada al pensar en comer un poco del postre de esa tarde salió de la cama.
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Revancha por tu amor
FanfictionSerena estaba embarcada en un matrimonio fatídico que día a día le consumía la vida, hasta que de pronto, todo su mundo se altera cuando se vuelve parte de un convenio entre dos hombres.