Capitulo 10

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-Len: Ya estas lista?

-Si...

Baje la cabeza con la esperanza de ocultar el rubor de mis mejillas, ni siquiera entendía porque demonios me sonrojaba ante su mirada, aun más teniendo en cuenta que el ya me había visto completamente desnuda múltiples veces. Ellos habían visto más de lo que le hubiera enseñado nunca a nadie, sus manos habían pasado por lugares que jamas hubiera dejado a nadie tocar, y me habían echo cosas que no le habría deseado ni a mi peor enemigo.

Quizás de los dos Len haya sido el más "dulce", y desde que Lenka me dijo aquello mientras me tomaba los cereales cada vez que mi vista se desviaba a su rostro no podía evitar ponerle el rostro de aquel niño pequeño. Fui hacia la puerta evitando mirarle a los ojos, pero al notar su mano apoyada en mi hombreo cuando llegue a su altura deteniéndome hizo que la alzara para mirar su rostro confundida.

-Len: Todavía no nos vamos, ya es la hora de comer.-dijo con una sonrisa deteniendo mi paso.

Observé con atención la sonrisa que se había formado en sus labios. Ahora que lo mencionaba tenía que haber pasado tiempo desde que comí los cereales porque mi estómago volvía a rugir exigiendo más comida. Creo que no era la única que lo escuchaba rugir y eso me avergonzaba todavía más, pero sabía que teniendo en cuenta mi caso era algo norma, después de todo lo más probable es que llevase bastante tiempo sin comer todo lo necesario y adecuado.

La mano que estaba en mi hombro fue bajando hasta que se unió a mi propia mano tirando suavemente de mi hacia la mesa de la cocina donde acabe sentándome en el mismo lugar en el que me había sentado esta mañana. La boca se me hizo agua al observar aquel plato humeante que Len había colocado delante de mí, instintivamente me relamí los labios al ver tal manjar al alcance de mi mano. Tenía aspecto de ser delicioso y si sabia tan bien como olía, por fin podré saciar todo a mi apetito, este sería el día en el que me pondría las botas. Si mi memoria no falla hace bastante tiempo desde la última vez que comí algo que no fuera precocinado y este plato daba la sensación de estar por encima de la media.

-Len: ¡Lenka! ¡A comer!

Gritó Len y casi al instante se escucharon pasos correr en el piso de arriba hasta que instantes más tarde la pequeña rubia estaba en el umbral de la cocina con una gran sonrisa. Su largo cabello se ondeaba al compás de sus rápidos pasos hasta que dedo aplastado por la silla al sentarse en esta. El momento de la comida paso en un santiamén, prácticamente devore la comida y eso que hasta repetí, estaba deliciosa, se notaba que Len era un excelente cocinero. Ninguno de nosotros hablamos durante la comida y al dejar los platos en la encimera, justo al lado del fregadero, Lenka se despidió de nosotros subiendo para hacer los deberes y ahora sí ambos salimos de la casa en dirección a la mía.

Comenzamos a caminar en silencio, no había mucho que contar en realidad, yo no quería tenia tema de conversación actúales, no quería contar lo que Kaito me había echo durante su ausencia, pero tenía miedo y curiosidad por saber todo lo sucedido desde que me raptaron aquel día. Para mi era como algo necesario saber cuánto tiempo había pasado desde entonces, y sobretodo el tiempo concreto que llevaba a solas con Kaito, era tan extraño no saber ni en qué día me encontraba...

El iba unos pasos por delante mía, no muy rápido pero a mi me costaba un poco seguir sus pasos ya que mis piernas no se coordinaban demasiado bien, puede que fuera porque todavía estaba débil al no haber caminado nada desde que se fue, pero aun sin saber el motivo en concreto de este echo era algo que me preocupaba. Seguí caminando detrás de él, intentando mantener su ritmo, aquella espalda ancha... En realidad si que se parecía bastante a ese chico, pero a pesar de que lo que me había dicho Lenka no podía estar segura de que fuera el mismo chico a no ser que él me lo confirmara, así que decidí probar suerte. Sin embargo, justo cuando me disponía a hablar el hablo primero dejándome sin oportunidad de preguntar.

Rompiendo CadenasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora